Sucesos
La carta de despedida del padre de Marta Calvo
“Lo peor que puede vivir un padre es no saber dónde está su hija. 26 días de incertidumbre... con sus 26 noches hasta recibir esa llamada”, afirma
La desaparición de Marta Calvo en Manuel el pasado 7 de noviembre mantenía en vilo a las autoridades y a sus familiares. Los investigadores sospechaban que un hombre de 37 años y de origen colombiano era el responsable. Las pocas esperanzas de encontrarla con vida se desvanecieron ayer, cuando el sospechoso entró en la comandancia de la Guardia Civil para entregarse. Durante el interrogatorio reconoció que se deshizo del cadáver, que lo descuartizó y que repartió los restos por varios contenedores. También negó que la asesinara. Dijo que tomaron drogas y que ella murió mientras mantenían relaciones sexuales. Los investigadores no le cree y siguen con su trabajo.
Mientras tanto, detrás hay una familia rota. Desde el día de la desaparición sospechaban del detenido. Marta, de 25 años, le envió a su madre la localización del domicilio del detenido. Eran las 5,55 horas del 7 de noviembre. Era la última señal de vida de Marta y a pesar de ello, no perdían la esperanza de recuperarla con vida. Casi un mes después, la delegación del Gobierno en Valencia se puso en contacto con la familia de Marta para indicarles que su hija había tenido una muerte violenta. El padre ha querido compartir sus sentimientos con los espectadores y ha enviado una carta a “Espejo Público” en la que queda patente el tremendo dolor por la pérdida de su hija: "Vivimos desde hace casi un mes sumidos en una auténtica desesperación. Lo peor que puede vivir un padre es no saber dónde está su hija. Veintiséis días de incertidumbre, miedo, preocupación... con sus 26 noches, hasta recibir esa llamada.
Esa llamada que nunca hubieras querido recibir, esa llamada que te confirma tus peores sospechas. Un día que nunca esperabas vivir y que nunca vas a poder olvidar. Lo hemos padecido en familia, arropado por mi pareja, mis padres y mi hijo pequeño, el hermano de Marta. Un joven de 20 años que está sufriendo también.
Sin apenas conocer datos de la investigación durante este tiempo más que los revelados por los medios de comunicación queremos despedirnos de Marta recordándola juntos. Recordando esa sonrisa suya que no se puede olvidar. Recordando la sonrisa de esa niña dulce que se convirtió en una mujer llena de vida. Una vida truncada de forma atroz.
Pedimos únicamente respeto y justicia para Marta No queremos hacer mas declaraciones de las que hacemos con esta carta.Agradecemos el trato que nos habéis brindado y la posibilidad de poder expresar nuestros sentimientos.
Gracias también a todos los investigadores y cuerpos y fuerzas de seguridad que han trabajado incansablemente por saber qué le pasó a mi hija.
Sin más, Sergio Calvo".