Odisea marítima: Navegante rescatado tras permanecer dos meses perdido en el océano

La historia de Tim Shaddock tiene mucho de película de Hollywood, relato de aventuras o mito griego. La odisea particular de este marinero de 51 años, originario de Australia, comenzó durante el pasado mes de abril cuando partió desde La Paz, capital del estado mexicano de Baja California Sur, en dirección a la Polinesia Francesa a bordo de su catamarán, bautizado con el nombre de "Aloha Toa". Su perra Bella era su única acompañante. Lo que no sabía es que se convertiría en su principal salvación.

El objetivo de Shaddock era recorrer 6.000 kilómetros por alta mar, pero la realidad es que no logró llegar ni a la mitad de su travesía; una tormenta dañó su embarcación y los dispositivos electrónicos que lo mantenían comunicado con tierra. Shaddock quedó a merced del océano Pacífico.

Durante tres meses, las habilidades de supervivencia de Shaddock se pusieron a prueba. Se alimentó de pescado crudo y bebió agua de lluvia. Además, utilizó los restos de la embarcación para protegerse de unos potentes rayos de sol que podían llevarlo a la deshidratación. Pero sin duda, quien tuvo un papel fundamental en su supervivencia fue su perra Bella. La mascota hizo gala de su título de "mejor amigo del hombre" y acompañó al marinero en la soledad del océano.

Tras casi tres meses a la deriva, un navío de pesca mexicano se cruzó en el camino del marinero extraviado. Fue trasladado junto a su mascota en el helicóptero que acompañaba a la embarcación. Se le realizaron distintas pruebas médicas que certificaron su buen estado de salud. Él aseguró ante los medios australianos que únicamente necesitaba "un descanso y una buena comida".