Vídeo: El espectáculo natural de la migración de estorninos en Italia

Cada año, desde octubre hasta febrero, millones de estorninos realizan un viaje impresionante desde el norte de Europa hasta Italia en busca de climas más cálidos para sobrellevar el invierno. Este fenómeno natural se ha convertido en una verdadera obra maestra en los cielos de Roma, donde estos pájaros ejecutan una coreografía sincronizada sobre los antiguos edificios, hipnotizando a aquellos que se detienen para contemplar las figuras misteriosas que forman en el firmamento.

La migración de estorninos en Italia: Un espectáculo celestial

La migración de estorninos es un espectáculo de la naturaleza que pocos tienen la suerte de presenciar. Cada año, estos pájaros de 20 centímetros de longitud abandonan las gélidas regiones del norte de Europa y emprenden un viaje épico hacia tierras más templadas en Italia. A medida que el invierno se instala en su lugar de origen, los estorninos inician su travesía en busca de refugio y alimento.

La ciudad de Roma: un refugio invernal para estorninos

Roma, la icónica capital de Italia,se convierte en el hogar temporal de estos viajeros alados durante la temporada invernal. Durante el día, los estorninos se aventuran en las zonas rurales en busca de comida. Sin embargo, al caer la tarde, la ciudad se transforma en un inmenso dormitorio colectivo para ellos, creando una experiencia única para los observadores de aves y los curiosos.

Los desafíos de la presencia de estorninos en Roma

La llegada masiva de estorninos a Roma no está exenta de desafíos. Los pájaros, al pernoctar en los árboles de la ciudad, dejan tras de sí un rastro de excrementos que cubren las calles y los automóviles. Este problema de higiene urbana obliga a las autoridades locales a tomar medidas para espantar a estas aves.

La estrategia de espantapájaros en la ciudad eterna

Para combatir la presencia excesiva de estorninos, las autoridades de Roma han implementado una estrategia peculiar. Empleados de organizaciones como Fauna Urbis, como Valentina De Tommaso, han asumido el papel de espantapájaros humanos. Equipados con altavoces que emiten chillidos agudos, imitan las llamadas de alarma de los estorninos, provocando que estas aves alcen el vuelo y se trasladen a áreas menos pobladas de la ciudad.

Un respiro para Roma

Si bien la migración de estorninos puede generar algunos desafíos para la ciudad de Roma, también es un recordatorio de la belleza de la naturaleza y su capacidad para maravillarnos. La danza sincronizada de estos pájaros en los cielos romanos es un espectáculo que vale la pena contemplar, un regalo de la naturaleza que nos conecta con el mundo salvaje incluso en medio de la metrópolis.