Andalucía moviliza 732 millones, con pagos de 505 euros por trabajador en empresas golpeadas por la covid

Ya hubo una primera fotografía de unidad el 30 de julio de 2020 y hoy se ha llegado a la segunda tras 11 reuniones, más de 50 horas de negociación y alrededor de una veintena de versiones de un texto que han desembocado en el Acuerdo Andaluz para la Reactivación Económica y Social que permitirá la movilización de 732 millones en ayudas directas para combatir los efectos de la pandemia. Lo han rubricado en el palacio sevillano de San Telmo el presidente de la Junta, Juanma Moreno, y los máximos representantes de la patronal autonómica, la CEA, Javier González de Lara; de UGT-A, Carmen Castilla; y de CC OO-A, Nuria López; en presencia del vicepresidente regional Juan Marín y de otros consejeros.

Los incentivos se activarán «lo antes posible», según Moreno, y se agruparán en tres grandes bloques. El primero incluirá 14 líneas de ayudas dirigidas al mantenimiento del empleo y de la actividad económica por un montante de 585 millones. Dentro de ese apartado se fijará una partida de 270 millones para ayudar a que no se pierda personal asalariado que permitirá repartir 505 euros durante cuatro meses por trabajador en entidades de hasta 20 en los sectores más castigados por la crisis del coronavirus; y 1.000 euros para autónomos de actividades como los centros de peluquería y estética o los taxistas, hasta cubrir los 88,6 millones. Junto a ello se articularán 3.000 euros para pequeñas y medianas empresas (pymes) del comercio y la hostelería que hayan sufrido una caída de las ventas por la covid en 2020 de al menos el 20% sobre el año anterior, hasta un global de 86,3 millones; ayudas para las pymes de ocio nocturno, infantil y parques por un importe mínimo de 4.000 euros, hasta los 9,4 millones; 3.000 euros durante cuatro meses para los gimnasios y entes del sector cultural, a lo que se asignarán 14,2 y 4 millones, respectivamente; o 1.700 euros por licencia VD para el transporte público discrecional durante cuatro meses, de nuevo, y con una caída de ingresos del 20% respecto al ejercicio anterior, hasta un total de 6,8 millones, entre otras iniciativas que se armarán.

El segundo bloque del acuerdo, que acaparará en torno a 107 millones, irá encaminado a proteger a las personas más necesitadas y entre otras medidas se creará una prestación extraordinaria dotada con 30 millones, en línea con la Renta Mínima de Inserción Social, que permanecerá también, aunque se tendrán que hacer compatible entre sí y con el Ingreso Mínimo Vital (IMV) estatal, con la vista puesta en las situaciones de máxima urgencia. Para lograrlo se configurará una Mesa de Diálogo Social en el plazo de un mes, que además estudiará mejoras en el sistema de la dependencia. Asimismo, se aprobará un complemento de 210 euros para los trabajadores afectados por expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) con las prestaciones más bajas.

Por último,el pacto se cerrará con un plan de refuerzo del personal de la Junta, al que irán a parar 40,4 millones para realizar más de 1.700 contrataciones en las ocho provincias con las que poder responder al «enorme aluvión» de solicitudes que se prevé.

Ya en la reunión del Consejo de Gobierno que se celebre mañana se dará luz verde, vía decreto ley, al primer paquete de fondos, el ligado al mantenimiento del empleo asalariado de 270 millones, de acuerdo a lo expuesto por Moreno.

El máximo dirigente del Ejecutivo autonómico ha admitido que le hubiera gustado «sacar» las ayudas «un mes antes», pero ha explicado que han querido ser prudentes, hasta ver cómo se articulaban las nacionales –aún se desconoce la cuantía que corresponderá a la región– con el fin de que no colisionaran. Ha agradecido a los agentes económicos y sociales que hayan apostado por «ser parte activa de la búsqueda de soluciones para levantar» a la comunidad, ya que «no ocurre así tristemente en todas las comunidades ni en todos los rincones de Europa», ha lamentado.

A juicio del popular, lo firmado a cuatro bandas constituye «una muestra más» de que «hay una vía andaluza», una manera de hacer política en este territorio que implica que cuando se dialoga por encima de ideologías, aunque haya diferencias, «al final se consiguen las metas».

Castilla y López se han mostrado convencidas de que estos fondos servirán para sacar a la región del «pozo de la pandemia» y González de Lara, quien ha recordado que en un año se ha perdido el 5% del tejido productivo autonómico, unas 20.000 empresas; hadefendido que se han estructurado «en la dirección adecuada». Todos han coincidido en que el viaje no ha sido «fácil».