"El bloc"

Ella era nadie

“El relevo al frente de los socialistas andaluces es inminente después del toque a rebato de Juan Espadas”

En la imagen, los socialistas Juan Espadas y Susana Díaz
En la imagen, los socialistas Juan Espadas y Susana DíazJesús Prieto / Europa Press

El relevo al frente de los socialistas andaluces es inminente después del toque a rebato de Juan Espadas, que ya le ha puesto fecha de caducidad al mandato de Susana Díaz. Por alguna conexión cabalística que ignoramos, sin que sea descartable ese punto de sadismo que se reserva para las riñas entre antiguos inseparables, el alcalde de Sevilla y precandidato a la presidencia de la Junta de Andalucía ha elegido el día de las elecciones madrileñas para lanzar el proceso de primarias. Quizás desee mostrarle a su compañera cómo se retiene una comunidad autónoma a pesar del desgaste de muchos años en el gobierno y el asedio combinado de tres partidos, ponerla ante el espejo deformante de su incompetencia. En menos de dos semanas, o sea, quedará la ex presidenta amortizada antes de cumplir el medio siglo, pero no ha de tomarse el asunto como una vuelta de tuerca en la efebocracia que padecemos, sino como una corrección de la misma: si el aspirante ganase las elecciones de 2022, terminaría su primer mandato al borde de la sesentena. Si Díaz enfila el parking perpetuo de alguna canonjía irrelevante, será simple y llanamente porque jamás conectó con el electorado: ni con los andaluces en general ni con los militantes socialistas, que le patearon el trasero en cuanto pudieron elegir sin la vigilancia estrecha de sus cancerberos de pasillo. ¡Había que escuchar a sus pelotas cuando, recién entronizada, la señalaban como la gran esperanza de la socialdemocracia europea! El talento le dio para administrar malamente el cortijo que había heredado durante un lustro, al término del cual había convertido en chatarra al PSOE-A, otrora «máquina de ganar elecciones». Gustará Espadas al votante de las otras siete provincias: es un tío serio, no parece sevillano.