Energía

Los proyectos de hidrógeno esquivarán la sequía

Desde el Clúster Andaluz del Hidrógeno señalan que al «agua no tiene que ser potable» y que puede ser proporcionada «por cualquier recurso hídrico una vez desmineralizada»

La Unidad Aceleradora de Proyectos tiene asignado un proyecto de planta de hidrógeno verde en Los Barrios
La Unidad Aceleradora de Proyectos tiene asignado un proyecto de planta de hidrógeno verde en Los BarriosJUNTA DE ANDALUCÍAJUNTA DE ANDALUCÍA

La sequía es uno de los grandes problemas que deberá afrontar Andalucía en los próximos años. Lo habitual, cada vez que pensamos en la escasez de agua, es relacionar las pérdidas que esto genera con el sector agrícola, pero los problemas hídricos son trascendentales en otros ámbitos, como es el de la energía.

Según la Estrategia Energética de Andalucía 2030, la sequía y los cambios de la disponibilidad del recurso agua, así como su pérdida de calidad es uno de los factores de riesgo más altos. La falta de recursos hídricos afecta para el uso en generación eléctrica: hidroeléctrica, termosolar, biomasa, para el almacenamiento de energía en forma de bombeo y para una de las esperanzas energéticas de los próximos años: la producción de hidrógeno renovable.

Según se apunta en el citado documento, en 2020, la Comisión Europea adoptó la Estrategia Europea del Hidrógeno con acciones para apoyar la producción, distribución y uso del hidrógeno limpio, estableciendo un objetivo para 2030 de 40 GW de electrolizadores y la producción de 10 millones de toneladas de hidrógeno verde.

La cuestión es hasta qué punto la actual sequía puede afectar a los distintos proyectos de producción de hidrógeno y si, tal y como se especifica en la Estrategia Energética de Andalucía 2030 la falta de recursos hídricos es un factor de riesgo alto. Desde el Clúster Andaluz del Hidrógeno, la primera asociación empresarial dedicada a la tecnología basada en el hidrógeno como ente energético en la región, trasladan a LA RAZÓN un mensaje tranquilizador.

El Clúster, basándose en datos de la Agencia Europea del Hidrógeno y en el análisis del consumo de agua necesario para la producción de Hidrógeno verde quiere «acabar con la falsa idea de que producir Hidrógeno verde gasta mucha agua».

Apuntan que «para producir 1 Kg de Hidrógeno hacen falta 9 litros de agua desionizada. Con este H2 un vehículo eléctrico con pila de combustible recorrería unos 100 Km, que es el mismo agua necesaria para producir el gasoil que necesitaría un vehículo similar para recorrer 40 Km».

Explican también que «en 2030, la Unión Europea prevé producir 10 Millones de toneladas de H2 verde» y que «para eso harán falta 89 millones de toneladas de agua para la electrolisis, lo que representa el 0,00478% de los recursos anuales de agua dulce de la UE».

También señalan que «el agua necesaria para la electrólisis a gran escala puede ser proporcionada por cualquier recurso hídrico (agua de mar, aguas residuales, etc.) una vez desmineralizada mediante plantas de ósmosis inversa» por lo que «el agua no tiene por qué ser potable».

Ponen como ejemplo a Portugal que, en su estrategia del H2, desea producir 2,5 GW de electrólisis en 2030 y que para ello «será necesario consumir el 1% del agua residual que genera el país».

«Solo usando el agua residual que se genera en Portugal bien tratada, podría satisfacerse el 675% de las necesidades de agua necesarias para la producción de los 10 millones de toneladas de H2 verde que desea producirse en toda la UE en 2030», insisten.

Además, «desde la perspectiva de la economía circular, la tecnología del hidrógeno no consume agua, ya que el agua se produce, en su forma más pura, al final del ciclo y también evita la contaminación del agua asociada a diversos procesos de los combustibles fósiles».

Por último, esgrimen que «un vehículo de H2 con pila de combustible purifica el aire del entorno en el que se mueve».

Con estas premisas, los principales proyectos relacionados con el hidrógeno como vector energético del futuro que se desarrollan en Andalucía no correrían ningún riesgo. Entre otros, están próximos a ser aprobados definitivamente y con ejecución a corto plazo gracias a la financiación europea el de Viridis, una compañía alemana que desarrollará en Arcos de la Frontera un proyecto de producción de Metanol verde para la industria alemana, usando H2 verde y CO2 de captura de procesos contaminantes. Esta compañía pretende desarrollar plantas similares en Linares y Córdoba.

Igualmente, Iberdrola impulsa un gran proyecto de producción de amoniaco verde en asociación con Fertiberia en Huelva, el Proyecto Puerta Europa.

También hay en marcha un proyecto con CEPSA en San Roque de Hidrógeno Renovable o el de Consentino en Almería, que incluye generación de Hidrógeno con energía solar para la descarbonización de la movilidad.

A todos ellos hay que sumar la instalación para la producción de Hidrógeno destinado a consumo local en la industria en Niebla, Huelva; un proyecto pionero y singular de producción y consumo de Hidrógeno renovable en el Polígono Industrial La Isla, en Dos Hermanas (Sevilla); el Proyecto Green Hydrogen en Los Barrios, (Cádiz); el Málaga Valle de H2 Verde; la instalación para la producción de Hidrógeno destinado a consumo local en industria y para transportes urbanos en Alcalá de Guadaira (Sevilla); el Proyecto Hidrógeno verde Alpeorujo en Jaén; el Alener en el Puerto de Sevilla; el de Alcalá la Real, producción de Hidrógeno a partir de Energía solar fotovoltaica; o el de Coagener en San Roque (Cadiz) de producción de Hidrógeno renovable.

Si la previsión se cumple, la sequía no impediría la culminación de estos proyectos, que situarían a Andalucía como una región puntera en la producción de hidrógeno en Europa.