Cine

Reconocimiento a María de Medeiros en la clausura de Fical

La actriz recibe el galardón “Almería, tierra de cine” por su trayectoria

La actriz portuguesa Maria de Medeiros descubre una estrella con su nombre en el Paseo de la Fama de Almería
La actriz portuguesa Maria de Medeiros descubre una estrella con su nombre en el Paseo de la Fama de AlmeríaCarlos BarbaAgencia EFE

La actriz María de Medeiros ha inaugurado la estrella que lleva su nombre en el Paseo de la Fama de Almería como preámbulo de la gala en la que recogerá este sábado el galardón ‘Almería, tierra de cine’ que le ha otorgado el XXI Festival Internacional de Cine (Fical) en reconocimiento a una “gran dama de la interpretación europea” y a una trayectoria “maravillosa, que se mueve entre dos aguas y da una visión completa” del oficio. “Es un premio que me da ganas de seguir; en una atención a mi carrera, un pequeño empuje para que siga pensando en nuevos proyectos, que, porqué no, incluyan Almería”, ha dicho María de Mederios en su retorno a la provincia donde rodó hace 21 años la comedia ‘Honolulu Baby’ (2001) con el director italiano Maurizio Nichetti.

En rueda de prensa, la actriz, quien ya ha experimentado lo que significa ponerse detrás de las cámaras, ha destacado el “vínculo” que hoy se fortalece con Almería y ha asegurado que es un “honor auténtico” echar una “pequeña manita” para que se “consolide la marca” de Fical y para que Almería se confirme como “una tierra de cine absolutamente internacional”. Ha relatado cómo vivió un rodaje “de fantasía, de locura, pero práctico y de enorme eficacia en el trabajo” con Nichetti en la provincia y, en concreto, en el faraónico poblado cinematográfico y escenario de míticas obras, ‘El Cóndor’, en el desierto de Tabernas, que vivió su última grabación con esta película italiana.

“Tengo esa nostalgia de volver a un lugar de espléndida belleza, que me fascinó, por lo que me tomo este premio como una invitación para volver”, ha afirmado. María de Medeiros ha reivindicado en el marco de Fical a los “festivales pequeños, en ciudades pequeñas, descentralizados” ya que son los que propician, según ha destacado, y donde se dan “los encuentros creativos”.

“Fue en un festival muy pequeñito, en Avignon (Francia), donde conocí a Quentin Tarantino, que presentaba su primera película, ‘Reservoir Dogs’, y donde hice una amistad de cinefilia con él. Eso es lo bonito de los festivales pequeños porque en los grandes se cruzan batallones de equipos que no se comunican”, ha evocado. La actriz y directora ha contado como su dilatada carrera esta formada por “sorpresas, cosas no planeadas” e impulsada por “propuestas inesperadas”, por lo que, “casi por superstición, no pienso ni formulo un deseo, sino que pienso que va a aparecer”.

“Lo que más me seduce del oficio es que cada película es cúmulo de muchísimos encuentros a nivel artístico y creativo y, por eso, en general, nunca me planteo con quién o en qué me gustaría trabajar”, ha explicado.