Salud Pública

¿Puede regresar la malaria a España a través de Andalucía?

El Poniente Almeriense es una zona de alto riesgo por su cercanía a África, el clima y la gran cantidad de migrantes. Investigadores evalúan si existe riesgo de transmisión local

Imagen de mosquito
Los mosquitos transmiten el parásito "Plasmodium", que causa la malariaEuropa Press

La malaria o paludismo es una enfermedad erradicada en España desde 1964, pero cada año se registran cientos de casos importados. Tanto, que en los últimos años se está produciendo un preocupante aumento de la incidencia. Así lo demuestran las cifras del Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC): si en 2014 se notificaron en España 68 casos de Malaria, en 2015 fueron 706; 755 en el año 2016; 818, en 2017; y 851 en el 2018. El principal motivo de este incremento es una mayor frecuencia de viajes a países endémicos y que la adherencia al tratamiento profilático es baja.

Según la Sociedad Española de Medicina Tropical y Salud Internacional (SEMTSI), Andalucía es la cuarta comunidad con más incidencia de malaria, por detrás de Madrid, Cataluña y la Comunidad Valenciana. Dentro de la comunidad andaluza, es Almería la provincia que aglutina la gran mayoría de casos. Según los datos del Sistema de Vigilancia Epidemiológica de Andalucía (SVEA), de los 165 casos notificados a la Red Alerta del SVEA en toda Andalucía en 2021, más de la mitad (85) se produjeron en esta zona. De esos 85, un total de 61 pertenecen al Distrito Poniente, distribuidos en cuatro municipios: 22 casos en Roquetas de Mar, 17 en Vícar, 12 en El Ejido y 10 en La Mojonera.

El riesgo es que la malaria deje de ser importada y empiecen a aparecer casos locales. De hecho, el año pasado una mujer se infectó de paludismo en el Hospital de Algeciras. No había viajado a países endémicos, por lo que Salud Pública determinó que contrajo la enfermedad a través de material sanitario infectado.

Ante esta situación, la Unidad de Medicina Tropical del Hospital Universitario Poniente ha impulsado un proyecto para evaluar el riesgo de reintroducción de la malaria en el sur de España, un proyecto que cuenta con la colaboración del Centro Nacional de Microbiología del Instituto Carlos III de Madrid.

El director de la Unidad de Medicina Tropical, Joaquín Salas, explica que «a través de este trabajo pretendemos estudiar si en el poniente almeriense existe la posibilidad real de transmisión local de la malaria, porque el conocimiento preciso de ese riesgo permitiría establecer programas de control vectorial y medidas encaminadas a implementar programas de cribado entre la población susceptible de transmitirla».

El poniente almeriense es una zona de alto riesgo ante una posible reintroducción de la malaria por su localización geográfica; próxima a África, por el intenso tráfico con este continente de personas, vehículos y mercancías; el alto porcentaje (21%) de población migrante residente; así como el clima y la variedad de ecosistemas que favorecen la viabilidad de diferentes especies de mosquito «Anopheles spp.», transmisor de la enfermedad.

El estudio tiene tres objetivos principales: identificar las cepas del parásito de la malaria, el «plasmodium», en los pacientes con malaria atendidos en el poniente almeriense; determinar si los mosquitos de la especie «Anopheles» presentes en la zona tienen la capacidad de completar el ciclo de este parásito; y en tercer lugar, evaluar la tecnología de Amplificación Isotérmica Mediada por Bucle (LAMP, por sus siglas en inglés) para el diagnóstico y cribado de la malaria.

El plan de trabajo del estudio incluye la captura de mosquitos en la zona, previa selección por parte de los investigadores de los lugares idóneos para el hábitat de los «Anopheles». Los insectos capturados serán identificados fenotípicamente por la Universidad de Zaragoza y genéticamente por el Instituto de Salud Carlos III

Por otro lado, se realizarán capturas de ejemplares vivos, que serán enviados a la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza, para establecer colonias y poder realizar infecciones artificiales con las muestras de sangre de pacientes atendidos en el Hospital Universitario Poniente diagnosticados de malaria. Paralelamente, el Instituto Carlos III estudiará en estos mosquitos la presencia de genes que favorezcan la infección por el parásito de la malaria.

El otro objetivo del proyecto consiste en probar la eficacia de una nueva tecnología, la LAMP, para el diagnóstico a bajo precio del paludismo.