La niña de 18 meses que se marchó de la guardería de Sevilla salió por una puerta con la cerradura averiada

Una cerradura que estaba averiada a causa del vendaval de hace unas semanas en Sevilla facilitó que una niña de 18 meses saliera por la puerta de su guardería y deambulase sola por una avenida hasta que fue encontrada por dos personas cuando intentaba ponerse de pie y cruzar la vía.

La directora de la guardería ha dicho este miércoles que, a raíz del temporal, "la cerradura saltó y la arreglaron en una ocasión", pero "la semana pasada volvía a dar fallos, la volvieron a arreglar", por lo que cree que "la familia que recogió anteriormente a un niño tuvo la intención de cerrar pero no cerró correctamente".

En declaraciones a Radio Sevilla recogidas por EFE, la directora del centro infantil ha dicho que, debido al estado de la puerta "con solo empujarla ya se puede abrir", y ha explicado que "la puerta de entrada va directamente al patio, es un patio muy grande y tiene como dos zonas diferenciadas, una en la que suelen estar los peques", y la niña salió de centro y se encaminó hacia las calles cercanas.

La directora ha aclarado que la madre de la menor es trabajadora del centro, y que, afortunadamente, la niña fue encontrada y llevada al centro educativo, a la vez que ha recalcado que "no le ha pasado nada".

Según ha explicado a EFE José María Lozano, una de las dos personas que la encontró en torno a las 14:30 horas del pasado lunes, cuando fue a recoger su moto al salir del trabajo en la avenida Isaac Newton, en la Isla de la Cartuja, vio “a una niña pequeña que intentaba ponerse de pie para cruzar la avenida” y enseguida se dio cuenta de que estaba sola “porque a esa ahora en esa calle solo hay gente saliendo del trabajo”.

Entre una mujer que se aproximó a la niña y él se hicieron cargo de la menor, que comenzó a llorar cuando se vio desorientada, y, como primera medida, llamaron al 112, que a su vez activó a la Policía Nacional y Local.

Los agentes localizaron la guardería de la pequeña, a la que fue trasladada de forma inmediata.

Lozano calcula que la pequeña tardó una hora aproximadamente en regresar a la guardería, teniendo en cuenta la distancia que hay desde la guardería hasta el lugar donde fue hallada, unos 200 metros, y que gateaba y a duras penas podía andar.