Economía

Santa Bárbara logra un contrato de 36 millones para el mantenimiento de obuses del Ejército de Tierra

La empresa tiene centralizada en su planta de Alcalá de Guadaíra los servicios de mantenimiento, reparación, actualización, modernización y apoyo en el ciclo de vida de vehículos y sistemas de armas

La empresa Santa Bárbara trabaja ya en la rehabilitación de 5 Leopard 2A4 para su envío a Ucrania
La empresa Santa Bárbara trabaja ya en la rehabilitación de 5 Leopard 2A4 para su envío a UcraniaEJÉRCITO DE TIERRAEJÉRCITO DE TIERRA

La Jefatura de Asuntos Económicos del Mando de Apoyo Logístico del Ministerio de Defensa ha adjudicado a Santa Bárbara Sistemas, propiedad de General Dynamics, un contrato de 36,3 millones de euros para el mantenimiento de los obuses modelo 55/52 Modelo Siac V07 del Ejército de Tierra, toda vez que dicha empresa tiene centralizada en su planta de Alcalá de Guadaíra (Sevilla) sus servicios de mantenimiento, reparación, actualización, modernización y apoyo en el ciclo de vida de vehículos y sistemas de armas. Se trata de un contrato negociado con publicidad, cuya adjudicación publicaba el pasado martes la Plataforma de Contratación del Sector Público, según figura en la misma.

Recientemente, la planta alcalareña de Santa Bárbara Sistemas acogía por cierto la entrega al Ejército de Tierra de los primeros siete vehículos blindados de combate de ocho ruedas modelo Dragón contratados por el Ministerio de Defensa, tras su integración, montaje y pruebas en dicho centro fabril. Ello, después del conflicto laboral vivido meses atrás en esta factoría a cuenta de los 21 despidos acometidos en la misma por la empresa, afectado así a cerca del diez por ciento de la plantilla, y la decisión de centralizar en la fábrica del grupo en Trubia (Asturias) la carga de trabajo correspondiente a la producción de los 348 ejemplares del nuevo vehículo blindado de combate de ocho ruedas Dragón contratados por el Ministerio de Defensa a Santa Bárbara, para el Ejército de Tierra.

LA CARGA DE TRABAJO

Dicha situación motivó un prolongado conflicto laboral, en el que la plantilla reclamaba revertir los despidos y que la planta de Alcalá participase plenamente del contrato de los blindados Dragón, pues sólo le había correspondido el ensamblaje de las siete primeras unidades del total de 348, para conservar su papel de centro de producción; mientras la dirección de la empresa aseguraba que la "reconfiguración" de su actividad no implicaría una "pérdida de puestos de trabajo directos" en la planta alcalareña. Tras acceder a revertir los mencionados 21 despidos, pues el Ministerio de Defensa había recordado los compromisos adquiridos por la empresa en materia de empleo, la dirección de Santa Bárbara defendía que "la especialización de la actividad de la fábrica alcalareña en mantenimiento, reparación, actualización, modernización y apoyo en el ciclo de vida de vehículos y sistemas de armas consolida su nivel de actividad presente y futura, reforzando las capacidades que ya posee en este sentido para dar respuesta a las necesidades, presentes y futuras, de las Fuerzas Armadas".

EL "PLAN INDUSTRIAL"

Finalmente, la situación fue solucionada y las movilizaciones fueron suspendidas, al considerar los sindicatos que la compañía había aportado un "plan industrial" que garantizaba carga de trabajo y empleo para la factoría sevillana al menos hasta 2027, con los talleres de montaje de motores, de instalaciones eléctricas, reparaciones, montajes y pruebas de los blindados y labores de mantenimiento y modernización de vehículos militares como el Leopardo en todas sus versiones y Pizarro en fase uno, además del mantenimiento de los obuses.

Meses atrás, en ese sentido, la dirección de la empresa encargaba a la planta alcalareña la ejecución de un contrato de casi 14,4 millones de euros encomendado por la Armada, para las labores de mantenimiento de 21 vehículos de combate de infantería modelo Piraña III. Además, en este centro comenzaba recientemente la rehabilitación de media decena de carros de combate Leopard 2A4, para su envío a Ucrania merced a los compromisos adoptados por España.