Arqueología

Los vestigios del estanque ritual confirman la importancia de la mayor sinagoga de Europa

Las excavaciones están revelando hallazgos de gran valor histórico y se ha documentado la cimentación de la bimá, plataforma central del templo

Sinagoga encontrada en Utrera (Sevilla)
Sinagoga encontrada en Utrera (Sevilla)La RazónLa Razón

El Ayuntamiento de Utrera (Sevilla) ha localizado vestigios de la mikvé, el estanque ritual judío de la sinagoga descubierta en la localidad en 2023, que a día de hoy es la mayor de su estilo descubierta en Europa, lo que confirma su importancia en los edificios de su época.

En sus redes sociales, el Ayuntamiento ha informado de que las excavaciones están revelando hallazgos de gran valor histórico y se ha documentado la cimentación de la bimá, plataforma central de la sinagoga.

Con respecto a la mikvé, se ha identificado “una anomalía compatible”, con esta parte de la sinagoga, además de que se han encontrado restos óseos de enterramientos secundarios de los siglos XVI al XVIII.

El hallazgo se ha realizado con una prospección subterránea mediante un georradar especializado en arqueología, procedente de Alemania, de modo que se permite analizar el subsuelo sin necesidad de excavar, facilitando la detección de estructuras antiguas ocultas bajo tierra.

De esta forma se ha localizado el estante ritual que es un elemento clave en toda sinagoga, ya que constituye el espacio destinado a los rituales de purificación, fundamentales en la práctica del judaísmo.

Según la ley judía (halajá), este estanque debe contener agua natural (de lluvia, manantial o pozo) y mantenerse en constante renovación. Aunque no todas las sinagogas lo incluyen, su existencia refuerza la relevancia del edificio religioso.

Este descubrimiento consolida a la sinagoga de Utrera como la única conservada en la provincia de Sevilla y la segunda en Andalucía, junto a la de Córdoba.

La sinagoga fue descubierta durante los trabajos arqueológicos realizados en un hospital del siglo XV, que sacaron a la luz el complejo sinagogal más importante de los hallados en la Península Ibérica, del que se tenían referencias por el historiador Rodrigo Caro en torno al año 1604.

Las excavaciones se realizaron en un edificio que tuvo distintos usos a lo largo de la historia, como hospital, casa cuna, escuela, restaurante o sala de fiesta, hasta que en 2016 fue adquirido por el Ayuntamiento.