Niños 'herniados' desnudos atravesados por el árbol sanador: la curiosa tradición de este pueblo de Aragón en San Juan

Lobera de Onsella, en la comarca de las Cinco Villas, celebra este sábado 24 de junio, como plato fuerte de las celebraciones por la tradicional noche de San Juan, el rito del Herniado. Vigésima vez ya desde que sus vecinos lo recuperaran.

El casi ancestral ritual está directamente ligado a la magia de la noche de las hogueras por excelencia, pero también a mitos rurales que atribuyen propiedades fascinantes a los robles de una zona natural próxima al pequeño municipio, el de La Mosquera, donde se realizará la ceremonia, según informan desde la comarca aragonesa.

Una marcha hacia el 'bosque sagrado'

La liturgia dará comienzo a las 19.30 horas con una merienda popular en las eras de San Juan, una cita ineludible en la que los vecinos se juntan para compartir su comida y, sobre todo, ‘hermanarse’ todavía más.

Ya a las 22.00 horas, con el cielo completamente oscuro, todos los vecinos y curiosos iniciarán la marcha a pie hasta el frondoso bosque en el que se realiza el esperado ritual, que dará comienzo a las 22.30 horas. Después, todo finalizará con un baile en la plaza más popular del pueblo zaragozano.

Tómalo Juan, dámelo, Pedro; herniado te lo doy, sano te lo devuelvo

Así es el popular rito del Herniado: desde tiempos remotos, se basa en pasar a los niños "herniados", totalmente desnudos, a través de árboles partidos en su mitad. Pero antes, de brazos de un oficiante, que se debe llamar Pedro, a los del otro oficiante, Juan, se pasa al niño en cuestión hasta tres veces tras recitar este salmodia: 'Tómalo Juan, dámelo, Pedro; herniado te lo doy, sano te lo devuelvo', que se repite tres veces.

Una vez finalizado, se rellena con barro la abertura de los árbol y se venda ‘la herida’, dejando que el paso del tiempo haga el resto. Y es que la curiosa tradición cuenta que los árboles -uno por cada niño o niña herniado- que sanen harán que el menor en cuestión quede también sanado de su hernia.

Desde Francia para curarse de las hernias

A la ceremonia, en la que también pueden participar adultos para ‘sanar’ sus hernias, asisten desde su recuperación curiosos de todas partes, incluso desde Francia. Porque ya desde tiempos inmemorables, al rito del Herniado llegaban personas de la tercera edad con la esperanza de ser curados con tan esotérica tradición. Ahora, “el rito se ha quedado como un símbolo y se pasa a los bebés nacidos cada año en el pueblo”, argumenta Francho Chabier Mayayo, alcalde de Lobera de Onsella, en ‘El Heraldo de Aragón’.

Aún así, sigue siendo bastante fiel a lo que fue siglos atrás. Por ejemplo, el reconocido etnólogo Ramón Violant i Simorra escribe en su publicación 'El Pirineo Español' (1943), después de estudiar varios rituales similares en Cataluña y el resto de Aragón, que Lobera de Onsella es el pueblo "donde este viejo rito se conserva en toda su pureza y se practica con mayor y más solemne aparato".