Okupas
Así fue la desokupación de una vivienda en un pueblo de Ibiza por parte de los vecinos
La okupación se hizo viral a través de grupos en redes sociales y los vecinos terminaron organizándose para hacer una concentración frente a la vivienda y echar a los okupas
El propietario de una vivienda de Sant Antoni, en Ibiza, se sorprendió hace dos semanas cuando vio que había alguien en el interior de la casa que había heredado de su familia.
Al pasar por delante, descubrió que la vieja puerta de entrada del domicilio, ubicado en la calle Bisbe Cardona, cerca de la Iglesia, estaba completamente abierta. Por lo que decidió entrar para averiguar qué era lo que pasaba.
Dentro estaban una mujer española y un hombre de origen magrebí, como informaron posteriormente los medios locales.
Resistencia a marcharse
Después de confirmar que eran okupas, el propietario intentó mediar con ellos, a través del diálogo, para que salieran por su propio pie de la vivienda. Sabía que la vía judicial sería mucho más larga y farragosa, pero la pareja se resistió a marcharse.
De hecho, el dueño presenció (como se puede ver en un vídeo publicado en Diario de Ibiza) cómo varias personas cambiaban la puerta a plena luz del día, siendo, además, uno de los puntos más céntricos de la localidad.
El propietario les filmó durante el proceso y recibió varios insultos y amenazas de los okupas, que le pedían que dejara de filmar con la cámara del móvil.
Llamamiento por redes sociales
El suceso se viralizó a través de redes sociales y proliferó rápidamente por varios grupos de Facebook, donde los vecinos empezaron a organizarse para llevar a cabo una concentración en un gesto de solidaridad con el dueño.
También, ante la "inacción" de la Policía Local y la Guardia Civil, que acudieron al piso okupado después de que el dueño diera aviso sin poder hacer nada al respecto.
En ese sentido, el alcalde de Sant Antoni, Marcos Serra, manifestó que los cuerpos de seguridad están, en todo momento, "atados a lo que dice la ley", en declaraciones que dio a los medios después de lo ocurrido.
Desokupado por la presión vecinal
Una semana más tarde de que el domicilio fuera okupado, alrededor de un centenar de personas acudieron a la puerta de la casa para sacar a la fuerza a los okupas.
De hecho, varias de ellas accedieron al interior del inmueble y empezaron a lanzar por el balcón que da a la calle todos los enseres de la pareja. Mientras tanto, el resto del grupo gritaba y pedía que se marcharan, como publicó la prensa local.
Al cabo de un rato, apareció el hombre, que entró por el balcón hasta que de inmediato, aparecieron las fuerzas de seguridad que le exigieron salir de la casa. Finalmente accedió voluntariamente. Por su parte, el propietario agradeció a los vecinos su gesto públicamente.
La puerta de la vivienda fue tapiada días después para impedir que se vuelva a repetir este episodio que generó gran indignación entre los vecinos de Sant Antoni.
El problema de la vivienda
El drama de la vivienda se empieza a palpar, una temporada más, en la isla. El problema, extendido en todo Baleares y también otros puntos de España, se repite año tras año en Ibiza, sobre todo, con la llegada del verano.
Los alquileres desorbitados y las casas a precios de lujo han llevado, en muchos casos, a la desesperación a la hora de encontrar un sitio en el que vivir.