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La nieve cierra 17 puertos, obliga a usar cadenas en 18 carreteras y a extremar la precaución en veintena de vías de Castilla y León

La provincia de León es la más perjudicada por las inclemencias meteorológicas

Coches en el Alto del Puerto de Pajares (León que está cerrado para vehículos pesados
Coches en el Alto del Puerto de Pajares (León que está cerrado para vehículos pesadosJ.CasaresAgencia EFE

La nieve y el hielo cierran a estas horas 17 puertos en la Comunidad, obliga a usar cadenas en 18 carreteras y a extremar la precaución en otra veintena de vías, con especial incidencia en las provincias de Burgos y León, que suman una quincena de cierres y 16 con cadenas.

Además, desde la tarde del domingo se están embolsando camiones en la AP-1, en Rubena y Miranda de Ebro (Burgos), que se espera se abra a lo largo de la mañana. Al menos, en Ávila ya se encuentra abierto el carril izquierdo de la AP-51, en sentido Madrid, que también se había cerrado por meteorología adversa.

Así, se encuentran cerrados los puertos de Bocos, Portillo de Lunada, Portillo de la Sía y Estacas de Trueba, estos tres últimos en varios tramos (con lo que se contabilizan más de una vez), en la provincia de Burgos, donde también es imposible circular por la C-633 en Cernegula. Por su parte, en León están cerrados los puertos de Vegarada y Monteviejo y no se puede circular por la LE-481 en San Emiliano, la LE-315 en Piedrafita, la LE-333 en Puebla de Lillo, la LE-126 en La Baña y la LE-491 en Cabrillanes. En Salamanca, esta situación se da en el caso de la SA-203 en El Cabaco por culpa del hielo; y en Zamora, la ZA-103, a su paso por la capital provincial.

Además, es necesario el uso de cadenas y está prohibida la circulación de camiones y vehículos articulados en los puertos de Pajares, Leitariegos, Somiedo, Tarna, San Isidro o San Glorio, en León; en La Covatilla, en Salamanca. Además se requieren cadenas para circular por la LE-473 en Aralla de Luna, la LE-311 en Robles de Valcueva, la LE-234 en Puente Almuhey, la LE-215 en Besande, la LE-142 en Foncebadón y la N-625 en Riaño, todas ellas en León.

Las gélidas temperaturas volverán a ser este lunes las grandes protagonistas de las condiciones climatológicas de la Comunidad en una jornada en la que la nieve volverá a hacer acto de presencia aunque de forma mucho menor que en los últimos días en el norte montañoso de León. La caída de las temperaturas hasta los nueve grados bajo cero en algunos puntos de la Comunidad ha llevado a la activación de los avisos amarillos en toda la Comunidad salvo en la comarca leonesa de El Bierzo y en el sur de Salamanca. De hecho, esta madrugada se alcanzaron los 10 grados bajo cero, la mínima más importante de la Comunidad y entre las diez más bajas de España, en La Póveda de Soria, en la provincia soriana.

En el resto del territorio autonómico se prevén temperaturas de entre seis y nueve grados bajo cero. Los valores más bajos se esperan en la cordillera Cantábrica de Palencia y en el Sistema Central de Ávila, Salamanca y Segovia. Los ocho bajo cero se alcanzarán en la Ibérica de Soria y la cordillera Cantábrica de Burgos.

Los termómetros podrían llegar a los siete bajo cero en zonas de la meseta de León y Palencia, mientras que los seis bajo cero serán la temperatura más generalizada que se registrará en el resto de la Comunidad.