Sociedad

García-Gallardo advierte al Gobierno de que seguirán “muy vigilantes con todo lo que se haga en materia de víctimas del terrorismo”

El vicepresidente de la Junta inaguura en el Museo de la Evolución Humana de Burgos la exposición "Pegatinas del Odio", a partir de la colección de Fernando Iñigo Aristu

 El vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, inaugura la exposición ‘Pegatinas del Odio’
El vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, inaugura la exposición ‘Pegatinas del Odio’Ricardo OrdóñezIcal

El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, advirtió, en Burgos. de que van a “seguir muy vigilantes con todo lo que se haga en materia de víctimas del terrorismo y denunciando que el Gobierno central está apoyado en ellos, no sólo para las investiduras sino para aprobar presupuestos generales del Estado y leyes tan importantes como la reforma laboral”.

García-Gallardo precisó que la Vicepresidencia de la Junta tiene las funciones relacionadas con la defensa de las víctimas del terrorismo, su protección, y por eso, remarcó, “vamos a ir reclamando memoria, dignidad y justicia para todas ellas”. En esta línea, recordó que Castilla y León es la segunda Comunidad de España “más castigada por el horror del terrorismo” y que “por eso, tenemos una sensibilidad especial, más si cabe, respecto de todas las demás”.

Actualmente, apuntó que hay 379 víctimas que aún están esperando un juicio justo para que se resuelvan sus casos y que “ven con horror como el nuevo Gobierno central una vez más se vuelve a apoyar en los herederos de ETA y no solo en ellos, sino quienes se sirvieron de los CDR para practicar el terrorismo callejero en Cataluña y así conseguir sus fines políticos”.

García-Gallardo hizo declaraciones a los medios antes de inaugurar en el Museo de la Evolución Humana (MEH) la exposición ‘Pegatinas del Odio’, a partir de la colección de Fernando Iñigo Aristu, organizada por la Fundación Víctimas del Terrorismo y el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, con la colaboración de la Junta.

Consideró que exposiciones como la que abre sus puertas en el MEH bajo el título de ‘Pegatinas del Odio’ hasta el próximo 10 de diciembre, son “más necesarias que nunca”. En ella se muestran 600 pegatinas de las 60.000 que acumuló Fernando Iñigo Aristu (Vitoria-Gasteiz, 1960), uno de los mayores coleccionistas de pegatinas de España.

Las pegatinas empezaron a utilizarse en la década de 1970 como recurso para la propaganda y esta exposición muestra 600 piezas de un tema muy concreto: aquellas que fueron diseñadas por grupos radicales para transmitir mensajes de odio y defender el uso de la fuerza para conseguir algo en política.

“En ellas se señalaba personas, se ponía a organizaciones en la diana y tuvieron como consecuencia el asesinato de cientos de personas en España”, apuntó García-Gallardo. “Todo eso ha sucedido hasta antes de ayer en términos históricos y mientras tanto vemos un Gobierno central obsesionado con revivir todos los acontecimientos traumáticos que vivió la sociedad española durante el siglo XX”, criticó.

Sin embargo, defendió que desde Vox, “lejos de ese intento de amnesia colectiva que nos quiere introducir el Gobierno central, vamos a seguir estando muy cerca de todas las víctimas del terrorismo, no sólo de las de ETA, sino de las del resto de grupos terroristas como el Grapo o el FRAP”.

“Falsos delitos de odio”

Asimismo, el vicepresidente de la Junta se refirió, tras preguntas de los periodistas, a las críticas recibidas por su asistencia a las concentraciones en las sedes del PSOE: “Frente a los falsos delitos de odio que tratan de atribuirnos algunos como método de cultura a la cancelación para tratar de evitar que disintamos, está el odio de verdad, que es el que nosotros denunciamos aquí, el que tiene su reflejo en las 600 pegatinas que vamos a exponer en el Museo de la Evolución Humana de Burgos, y esa es la realidad”.

“Mientras el Gobierno se apoya en el odio de los secesionistas, en esos partidos que tienen sus manos manchadas de sangre, porque no olvidemos que Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) incorpora a miembros de Terra Lliure, que Bildu se fundó por miembros de ETA, nosotros lo único que hacemos es defender el orden, la ley y el Estado de Derecho”, manifestó.

Finalmente, García-Gallardo aseguró que “frente a quienes están odiando la unidad de España y frente a quienes apoyan personas que mataron a miembros del Ejército, de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, nosotros vamos a seguir adelante en nuestra actitud y en nuestra conducta de manifestarnos pacíficamente en concentraciones ciudadanas frente a la deriva tiránica del Partido Socialista”.

Testimonios

El presidente de la Fundación Víctimas del Terrorismo, Tomás Caballero, explicó que las pegatinas empiezan a usarse como recurso propagandístico en los años sesenta, aunque alcanzan su apogeo en los años 70 y siguientes. El filósofo y experto en violencia política Martín Alonso, citado en los paneles de la exposición, identifica cinco elementos en el discurso del odio.

El primero, establecer una oposición tajante entre ‘nosotros’ y ‘ellos’, sobre la que se asienta una idea de superioridad moral, pues ‘nosotros’ somos los buenos. El segundo elemento es “la utilización de una agresividad extrema contra el otro, al que se deshumaniza y se convierte en un enemigo a batir, no solo en un rival político”.

El tercer ingrediente es “presentar la confrontación como algo inevitable, e incluso deseable, animando a golpear fuerte”. Una cuarta clave apunta a “la convicción de que la batalla la libra un grupo selecto de individuos comprometidos”. Y una quita idea esencial es la que asume que “el fin justifica los medios y que, por tanto, la salvación vendrá de la mano de la violencia”.

En la exposición pueden verse ejemplos desde descalificaciones y amenazas contra las fuerzas de seguridad y contra ciudadanos concretos (desde el exlehendakari Juan Mari Atutxa, al periodista José María Calleja), a apelaciones épicas a la lucha violenta con lemas como “en favor de los gudaris de ayer, de hoy y de mañana”. O pegatinas como una que muestra a un niño pequeño que se identifica como miembro de los grupos callejeros del entorno etarra.

La exposición permite redescubrir el papel destructivo de los Grapo, organización terrorista que asesinó a 92 personas entre 1975 y 2006 y cuya contribución al terror ha quedado en segundo lugar por el protagonismo de ETA. “Sus víctimas son las más olvidadas debido a que su actividad ha resultado desplazada por la de ETA”, explicó el responsable de prensa del Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, Gorka Angulo.

Alejo Vidal-Quadras

Por otra parte, el vicepresidente de la Junta exigió que “se aclaren todas las informaciones que se tengan” sobre la detención hoy de tres sospechosos del atentado contra Alejo Vidal-Quadras, dos en Granada y uno en Málaga porque, advirtió, “son sucesos de enorme gravedad”.

Alejo Vidal-Quadras, de 78 años y expresidente del PP catalán y cofundador de Vox junto a Santiago Abascal y José Antonio Ortega Lara, fue hospitalizado de urgencia tras recibir un disparo en la cara a la altura del número 40 de la calle Núñez de Balboa, en el madrileño barrio de Salamanca el pasado 9 de noviembre. La Audiencia Nacional se hizo cargo de la investigación ya que podría tratarse de un posible atentado terrorista. El propio Vidal-Quadras indicó que el ataque podría estar vinculado con sus relaciones con la oposición iraní.

En este contexto, consideró que “hasta ahora lo único que sabemos es que se ha detenido a un ciudadano de origen magrebí en Málaga esta mañana”. Además, manifestó que se está “también en un momento en el que vemos que se refuerza la vigilancia a posibles terroristas yihadistas que vemos que en Andalucía el año pasado asesinaron a un religioso en Algeciras”.