Medio Ambiente
Los guardianes de la biodiversidad vallisoletana
Una veintena de adolescentes participan en un campo de voluntariado, en el Pinar de Antequera, a través del cual se llevan a cabo labores de mantenimiento, limpieza y rehabilitación de entornos naturales mientras se divierten
Tener la oportunidad de divertirse a la vez que se colabora en el mantenimiento de entornos rurales o naturales son dos actividades que, combinadas, sólo ofrecen los campos de voluntariado. En Castilla y León, se celebran hasta once al amparo de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades: 242 jóvenes de entre 16 y 30 años ponen en práctica, durante dos semanas, valores esenciales como la convivencia, la tolerancia, la solidaridad y la interculturalidad.
La directora general del Instituto de la Juventud de Castilla y León, Estela López, ha visitado esta mañana el campo ‘Zarambuja 23’, con centro de operaciones en el Pinar de Antequera, en Valladolid, aunque el equipo de voluntarios realiza actuaciones por varios puntos de la provincia. Allí ha explicado que la mayoría de estas actividades de voluntariado se celebran en el ámbito rural, lo que contribuye a dinamizar los municipios durante los meses de verano y a acercar a los jóvenes a este entorno, puesto que muchos no tienen contacto habitual, según informan fuentes de la Junta.
En este campo, que se alargará hasta mañana, 15 de julio, participan 22 jóvenes de 16 y 17 años, de los que 12 son de la Comunidad y 10 proceden de otros puntos de España, como Cantabria, Andalucía, Madrid, País Vasco y Comunidad Valenciana.
A través de esta actividad concreta, organizada por la Fundación Splora en colaboración con los ayuntamientos de Valladolid y Medina del Campo y otras entidades juveniles, se realizan intervenciones en los entornos naturales del Pinar de Antequera, del Canal de Castilla a su paso por La Overuela y de la reserva biológica urbana de ‘El Tomillo’, en la capital, pero también en espacios de Medina del Campo o Simancas.
Los jóvenes participantes llevan a cabo labores de mantenimiento, limpieza, reposición de señales y adecentamiento de infraestructuras, así como diversas actuaciones para preservar la flora y la fauna.
Estas intervenciones en el plano físico van de la mano del aprendizaje y la sensibilización medioambiental, además de la innovación social, el intercambio enriquecedor entre los participantes y del disfrute de enclaves culturales y naturales de la provincia de Valladolid, tal y como ha manifestado la directora general del Instituto de la Juventud.
De hecho, también se incluyen visitas a museos, el casco histórico de la ciudad, exposiciones, conciertos, así como la participación en programas de los espacios jóvenes Norte, Sur y Pinar, y en ‘Vallanoche’, promovidos todos ellos por el Consistorio de la capital. Así, junto a las actividades relacionadas con la preservación del medio ambiente, se ofrece a los jóvenes otras complementarias de ocio y animación sociocultural.
Campos de voluntariado en cinco provincias
El programa campos de voluntariado es otro clásico de la campaña de verano promovida por el Instituto de la Juventud de Castilla y León. ‘Zarambuja’ se une a la decena de actividades que se desarrollan en otros municipios como Gotarrendura −Ávila−; Béjar, Cabrerizos y Candelario −Salamanca−; Paredes de Nava y Aguilar de Campoo −Palencia−; Cerecinos del Carrizal y Nuez −Zamora− y las localidades vallisoletanas de Simancas y Medina de Rioseco.
Junto a las 242 plazas que se ofertan en los campos organizados en la Comunidad, Juventud pone a disposición de los jóvenes castellanos y leoneses 109 distribuidas por otras 15 comunidades autónomas que también impulsan este tipo de actividades.
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