Desarrollo rural

El trufiturismo más saludable y ejemplo de emprendimiento rural

La localidad vallisoletana de Canalejas de Peñafiel desarrolla la primera experiencia turística que fusiona marcha nórdica y gastronomía con la trufa negra como protagonista

Participantes de la primera experiencia de Marcha Nórdica y Trufiturismo en Canalejas de Peñafiel (Valladolid)
Participantes de la primera experiencia de Marcha Nórdica y Trufiturismo en Canalejas de Peñafiel (Valladolid)RFtrufasLa Razón

Los pueblos, sobre todo los más pequeños, necesitan de actividades y proyectos ya sean culturales, gastronómicos, turísticos o medioambientales, que sean capaces de dar vida y un futuro a quienes viven y trabajan en ellos.

También hacen falta emprendedores que sean inquietos y audaces, que tengan ideas en la cabeza además de agallas y valentía para ejecutarlas, con capacidad de innovar y que, por encima de todo, tengan pasión por lo que hacen y amor por el terruño.

Valores todos ellos que podrían resumir a la perfección a los protagonistas de este reportaje: RFtrufas y Territorio Rampinge.

Dos proyectos rurales en auge, uno en la provincia de Valladolid y el otro en la de Segovia, que aunque son distintos tienen mucho en común, por cuanto han apostado por actividades en las que existe aún mucho desconocimiento por parte del gran público pero que están creciendo poco a poco, y, además, han conseguido poner en el mapa a los municipios donde desarrollan sus iniciativas atrayendo turistas y visitantes que están ayudando a dinamizar también la economía local.

El primero se dedica a dar a conocer el curioso y singular mundo de la trufa a través de más de un millar de encinas truferas ecológicas que se extienden a lo largo y ancho de 2,5 hectáreas de terreno a 900 metros de altitud en la localidad vallisoletana de Canalejas de Peñafiel, mientras que el segundo promueve la Marcha Nórdica, una modalidad deportiva de resistencia al aire libre que consiste en añadir al caminar natural del cuerpo unos bastones especiales similares a los utilizados en el esquí y en la que se trabaja el 90 por ciento de la musculatura del cuerpo, en el municipio segoviano de Castrillo de Sepúlveda, en plena naturaleza con las Hoces del río Riaza y del río Duratón como protagonistas de excepción.

Una actividad que se ha consolidado en los últimos años como una excelente forma de ejercicio físico libre, que además fomenta las relaciones sociales, aporta felicidad y combate el estrés.

Pues ahora Raquel y Fernando, impulsores del proyecto de trufiturismo RFtrufas, y Nuria y Otero, las dos mujeres que desarrolllan Territorio Rampinge en Castrillo de Sepúlveda, han decidido aliarse y poner en marcha la primera experiencia conjunta de marcha nórdica y trufiturismo.

Ya lo decían ambas a este periódico en un reportaje sobre emprendimiento femenino hace un año, con motivo del Día Internacional de la Mujer, en el que hacían hincapié en la importancia de establecer sinergias con otros productores y emprendedores y avanzaban que estaban trabajando en cómo unir la marcha nórdica y el turismo de la trufa. Pues un año después, ese sueño se ha hecho realidad y ha llegado para quedarse, aunque de momento serán actividades esporádicas.

"Iremos programando las experiencias según nos cuadre porque cada uno tenemos nuestros proyectos y no siempre es fácil poder compaginarlo ya que esta actividad te lleva además casi toda la mañana", señala Raquel de Dios, de RFtrufas, quen avanza que la próxima experiencia combinada de marcha nórdica y truficultura se realizará el 24 de mayo.

En esta actividad se hace un recorrido de 5 kilómetros de marcha nórdica por la zona de Canalejas de Peñafiel y por los alrededores de las encinas donde se encuentra este producto gastronómico junto al mar de viñedos de la comarca.

Raquel y Fernando hacen una introducción a la truficultura a los participantes de la experiencia de marcha nórdica junto a su plantación de encinas truferas
Raquel y Fernando hacen una introducción a la truficultura a los participantes de la experiencia de marcha nórdica junto a su plantación de encinas truferasRFtrufasLa Razón

Raquel y Fernando, expertos truficultores, van explicando los entresijos de la trufa negra y cómo se busca con la ayuda de perros entrenados, en su caso con Lucas, un animal de raza Lagotto Romagnolo, conocido como un perro de agua, que es el encargado de buscar las trufas además de entretener a los turistas.

También explican la importancia de la truficultura en la gastronomía.y como acercar este tesoro culinario a particulares y restaurantes.

Mientras que Nuria y Otero van enseñando a los participantes primero a calentar y después a realizar los pasos caracetrísticos de esta modalidad deportiva al tiempo que corrigen cualquier fallo que pueda haber durante el trayecto.

La actividad se completa con una degustación de productos elaborados con trufa en la bodega de este proyecto de trufiturismo acompañado de un vino típico de la Ribera de Duero en jarrillo, en la que Raquel y Fernando explican también algunas de las recetas que se elaboran con esta joya gastronómica como la crema de queso y trufa, la miel con trufa o los famosos huevos truferos.

La primera experiencia se celebró el pasado 29 de marzo, y participaron cerca de veinte personas que tuvieron la oportunidad de explorar el entorno natural de una comarca espectacular además de disfrutar de los beneficios para la salud de la marcha nórdica.

La jornada culminó con una reflexión sobre cómo el turismo activo y la gastronomía pueden fusionarse para crear experiencias memorables y, de paso, contribuir a la sostenibilidad y al desarrollo de la zona.

Participantes de la marcha nórdica por los alrededores de Canalejas de Peñafiel
Participantes de la marcha nórdica por los alrededores de Canalejas de PeñafielRFtrufasLa Razón

Raquel de Dios asegura a este periódico que la actividad gustó mucho y avanzaba que con este evento pretenden dar comienzo también a una serie de actividades con las que quieren promover el turismo responsable en Canalejas de Peñafiel y atraer turistas interesados en conocer más sobre la marcha nórdica y la trufa.

Campaña de invierno

El pasado mes de marzo, RFtrufas puso fin a la campaña de trufiturismo de invierno, que es cuando se recoge este producto de la tierra, con buenas sensaciones y una gran satisfacción. "Hemos tenido todo los fines de semanas llenos y se ha quedado mucha gente fuera", señala Raquel, quien destaca que han recogido más cantidad de trufa también este año y que incluso han realizado algunas visitas entre semana con visitantes extranjeros.

Entre ellos destaca una expedición de croatas expertos en trufas que quisieron acercarse hasta Canalejas de Peñafiel para conocer el proyecto de trufiturismo de RFtrufas para poder exportarlo a su país.

Lucas busca trufas durante una de las visitas al proyecto de trufiturismo de RFtrufas durante esta campaña de invierno en Canalejas de Peñafiel
Lucas busca trufas durante una de las visitas al proyecto de trufiturismo de RFtrufas durante esta campaña de invierno en Canalejas de PeñafielRFtrufasLa Razón

De cara al próximo año, Raquel trabaja en nuevas ideas con las que innovar para ofrecer otras experiencias al turista, ya sean gastronómicas con distintos menús e incluso duclces, además de extender la actividad del sábado a la tarde para que quienes visiten esta zona de la comarca de Peñafiel tengan más opciones de ocio para disfrutar de su escapada.