Tudanca se postula otra vez como candidato "si quieren los militantes"

Los socialistas de Castilla y León despiden el año con sabor agridulce. Por un lado, satisfechos por que Pedro Sánchez siga siendo el presidente del Gobierno tras sus pactos con la extrema izquierda, independentistas catalanes, nacionalistas vascos y proetarras así como por el peso del PSOE de Castilla y León en el partido a nivel nacional y en este Gobierno con varios ministros de la Comunidad, como es el caso de los vallisoletanos Óscar Puente y Ana Redondo o la leonesa Margarita Robles, pero, por otra parte, descontentos por la pérdida de poder municipal, tras la debacle que sufrió el partido en las pasadas elecciones de mayo, en las que se han quedado sin algunas capitales importantes en las que gobernaban en la Comunidad como Valladolid, Burgos, Segovia o Ponferrada.

Por ello, y aprovechando el tradicional acto prenavideño del PSOE de Castilla y León un hotel cercano a la sede del partido en Valladolid para hacer balance del año que termina y hablar de actualidad política y perspectivas de futuro, el secretario regional del partido del puño y la rosa, Luis Tudanca, ha anunciado que de cara a los próximos meses, con vistas también en las elecciones europeas del año que viene, que darán un “nuevo impulso” al proyecto socialista.

Algo que harán, según avanzaba, a través de una escuela de gobierno que sirva para renovar su oferta a los ciudadanos. "Estamos fuertes y preparados para afrontar cualquier batalla y volver a ganar en las urnas al Partido Popular", decía, al tiempo que confirmaba que el será el candidato para seguir liderando el partido con la mente puesta en la Junta, siempre y cuando lo decidan los militantes, a pesar de haber intentado ya ser presidente de Castilla y León hasta en tres ocasiones sin éxito. De hecho, solo en 2019 estuvo muy cerca, ya que ganó las elecciones pero no pudo gobernar por el pacto de PP y Ciudadanos.

Tudanca anunciaba esta iniciativa en presencia de los altos cargos del partido en la Región, así como de la ministra de Igualdad, la vallisoletana Ana Redondo, que no quiso perderse este acto y la ocasión de arropar al dirigente burgalés.

Allí, además, el líder socialista defendía el compromiso de Óscar Puente con Castilla y León en materia de infraestructuras y mantenía su disposición y ofrecimiento para que el PP pueda romper con Vox en esta Comunidad y gobernar en solitario, aunque decía estar convencido de que los populares "no están en eso" tras rechazarlo en dos ocasiones anteriores.