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El PSOE y ERC postergan el acuerdo «sine die»

Constatan avances para «encauzar el conflicto político» pero no cierran ninguna entente en el encuentro celebrado en Barcelona

Final feliz
Final felizADRIAN QUIROGA

La tercera reunión entre el PSOE y ERC concluyó ayer sin acuerdo ni ninguna nueva cita en el horizonte, aunque con avances. Las negociaciones progresan en medio de un hermetismo informativo inquebrantable y en un clima de «optimismo moderado», según resumen desde ambas partes, que admiten también que la entente empieza a vislumbrarse. Sin embargo, todavía sin concreciones: ambas formaciones están aún a vueltas para definir la mesa de negociación que «encauce el conflicto político del futuro de Cataluña» y destacan «coincidencias notables» en materia de derechos sociales, civiles y laborales, según informaron en el comunicado conjunto publicado posteriormente.

Por ahora no hay ninguna reunión pública prevista, aunque mantendrán los contactos de manera discreta. El objetivo es conseguir un acuerdo ambicioso, que no se limite a la votación de la investidura y tenga recorrido a lo largo de la legislatura. De ahí que se esté avanzando notablemente en cuestiones de ámbito social, una circunstancia que, según apuntan fuentes conocedoras de las negociaciones, estaría muy ligada a la aprobación de los presupuestos. Los socialistas tratan también así de evitar que se reproduzca un escenario similar al que se dio tras la moción de censura: ERC contribuyó a que prosperara, pero después no dio apoyo a las cuentas y Pedro Sánchez se vio forzado a convocar elecciones.

En este sentido, tampoco se han desvelado qué contenidos concretos se están abordando, aunque ambas formaciones, junto a los «comunes», albergan posturas cercanas en materia social –revertir la reforma laboral del PP o el aumento del salario mínimo son algunos ejemplos–. Asimismo, las mismas fuentes también apuntan a un acuerdo que pase por la mejora competencial para Cataluña: en la línea de la propuesta que ha hecho recientemente la patronal catalana, Foment del Treball, se estaría barajando la cogestión de infraestructuras capitales entre el Estado y la Generalitat (crear un consorcio), como Rodalies –de máxima sensibilidad y es una reivindicación que el Govern viene haciendo desde hace mucho tiempo–, el Aeropuerto de El Prat o el Puerto de Barcelona.

En relación a la mesa de negociación, el meollo de las conversaciones, los avances todavía son una incógnita. Si bien el PSOE ha conseguido seducir poco a poco a ERC, que ya considera un logro que ahora se hable de «conflicto político» en lugar de «problema de convivencia». En esa línea, en el comunicado conjunto de ayer, ambos partidos consideraron que la crisis política debe abordarse desde «el respeto y el reconocimiento institucional mutuo».

En cualquier caso, ambas partes divergen en cuanto al calendario. ERC prefiere estirar los plazos y esperar a que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) decida sobre la inmunidad parlamentaria de Oriol Junqueras (19 de diciembre) y superar su congreso (21 de diciembre), mientras que el PSOE apuesta por una investidura antes de que termine el año. Más tarde o más temprano, lo cierto es que el acuerdo parece encarrilado y, en paralelo, también se van a ir cerrando otras ententes que van a permitir escenificar el entendimiento entre ERC, socialistas y morados: en los próximos días, se va a anunciar también un acuerdo entre Esquerra y «comunes» para aprobar los presupuestos de la Generalitat para 2020 tras dos prórrogas.