Desescalada en Cataluña: Terres de l’Ebre, el Camp de Tarragona y Alt Pirineu-Aran pasan a la fase 1 el lunes

A partir del lunes un 11% de los catalanes saltarán a la fase 1 de desescalada. Son los 852.093 habitantes de Terres de l’Ebre, el Camp de Tarragona y Alt Pirineu-Aran.

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha confirmado esta tarde, tras una reunión telemática con los representantes de cada Comunidad Autónoma, que acepta la propuesta de la Generalitat de Cataluña de gestionar las fases del desconfinamiento en base a las regiones sanitarias y no de las provincias.

La consellera de Salud, Alba Vergès, confiaba en que el Ministerio de Sanidad admitiría su plan y no se ha equivocado. Tampoco Fernando Simón que el lunes avanzó que no veía ningún problema para que Cataluña organizara el desconfinamiento teniendo en cuenta el comportamiento del virus en sus nueve regiones sanitarias, en vez de las cuatro provincias, tal y como propuso inicialmente el Gobierno.

Finalmente, la gestión de la desescalada se hará en base a las siete regiones en las que se organiza la sanidad catalana para distribuir los centros de atención primaria y los hospitales de referencia. Estas regiones con el Camp de Tarragona, Terres de l’Ebre, Catalunya Central, Girona, Alt Pirineu i Aran, Lleida, y Barcelona, que queda subdivida en tres zonas: Metropolità Nord, Metropolità Sud y Barcelona ciudad.

Ninguna de las nueve regiones está en riesgo epidemiológico elevado, pero aunque los contagios van a la baja, los estudios concluyen que el virus todavía circula. No pasar a la fase 1 el lunes no quiere decir que se haya esperar dos semanas para pasar a la siguiente fase. “Necesitamos unos días más para ver cómo se comporta el virus en el resto del territorio antes de avanzar a la fase 1 de desconfinamiento. Podemos cambiar de fase en cuestión de días”, aseguró la consellera. El Gobierno da la posibilidad de hacer propuestas de desescalada si el riesgo epidemiológico baja sin tener que esperar quince días de rigor.

El secretario de Salud Pública, Joan Guix, explicó que Cataluña plantea la desescalada en base a indicadores epidemiológicos, sociales y demográficos con los que se calcula la probabilidad de un rebrote del virus y la capacidad de respuesta del sistema sanitario de cada región. En base a cálculos a partir de la tasa de transmisión del virus y la incidencia de nuevos casos en los últimos 14 días, se ha elaborado una escala del 0 al 100 para evaluar el riesgo de rebrote en cada región sanitaria. En estos momentos, asigna un 8 a la región del Alt Pirineu i Aran; 18 a Terres de l’Ebre, y 21 al Camp de Tarragona, las tres zonas que el lunes pasarán a la fase 1.En total, hay cuatro categorías. Entre 0 y 30 puntos el riesgo de la epidemia es bajo. Entre 30 y 70 es moderado. Y entre 70 y 100, el riesgo de presentar una nueva oleada de contagios es alto.

La zona de la Cataluña Central tiene riesgo de 36 puntos. Barcelona Metro Norte, de 38; Barcelona Sur, de 58; Lleida de 60, y Girona de 68. Sólo Barcelona tiene un riesgo alto, con una asignación de 91 puntos.