Legislatura

El PSC firma con el soberanismo un pacto para aislar a Vox en el Parlament

Los socialistas de Salvador Illa se unen a ERC, Junts, los comunes y la CUP con un decálogo para aislar a la formación de Ignacio Garriga en la cámara

Una persona ultima los preparativos en el Auditori del Parlament de Cataluña donde, debido a las restricciones por la pandemia de coronavirus, se celebrará la constitución de la cámara catalana
Una persona ultima los preparativos en el Auditori del Parlament de Cataluña donde, debido a las restricciones por la pandemia de coronavirus, se celebrará la constitución de la cámara catalanaQuique GarcíaEFE

Al margen de las negociaciones al límite que el independentismo aún lleva a cabo para pactar la presidencia del Parlament, los partidos también se han sentado para firmar un pacto anti Vox al que han sumado un nuevo invitado: el PSC de Salvador Illa. Socialistas, republicanos, postconvergentes, comunes y antisistema han hecho público este jueves un decálogo para aislar a la formación de Ignacio Garriga en la cámara.

En el texto, en el que no mencionan explícitamente a Vox en ningún momento, las cinco formaciones se comprometen a combatir el discurso de la “extrema derecha” y a dejar a sus representantes fuera de órganos de decisión de la cámara catalana, como por ejemplo la Mesa.

El documento, titulado “Por un Parlament comprometido con la democracia, los derechos y la libertad”, se ha hecho público cuando faltan menos de 24 horas para la sesión constitutiva de la cámara y representa a 115 de los 135 diputados del hemiciclo. No lo han suscrito ni Cs ni el PP, al margen del partido de Garriga, cuarta fuerza en las urnas con 11 escaños.

Además de excluir a Vox de la Mesa -un órgano con siete puestos: una presidencia, dos vicepresidencias y cuatro secretarias, que el independentismo se disputa- también se vetará la presencia de Vox en las mesas de las comisiones, en la coordinación de los intergrupos y en la relatoría de los grupos de trabajo, y evitar que la presentación de ponencias colegiadas recaiga sobre diputados de dicha formación.

PSC, ERC, Junts, comunes y la CUP también quieren evitar, siempre que sea posible, su presencia en los nombramientos que dependen del Parlament, y rechazan “normalizar y legitimar la acción política” de Vox, por lo que no suscribirán ninguna iniciativa parlamentaria con éstos y tratarán de evitar que prosperen las suyas. Además, cuando se organicen los encuentros de trabajo entre los grupos parlamentarios y entidades para abordar temáticas concretas, informarán a las organizaciones implicadas de que no se convocará a formaciones “de extrema derecha”.

En el decálogo, los partidos se comprometen a impulsar las modificaciones legislativas y acciones necesarias para que se “blinde el Parlament de los discursos de odio y discriminaciones”, y se refuerce el Compromiso contra la Discriminación y el Acoso estableciendo sanciones en caso de que no se firme.

Vox, a la buhardilla

Los partidos acordaron la semana pasada en una reunión enviar a Vox a las salas de reuniones del piso de arriba, situadas en las buhardillas del Parlament. El PSC, con 33 escaños, ocupará ahora el ala próxima a la presidencia de la cámara, el lugar donde la pasada legislatura estaban los diputados de Ciudadanos. El partido naranja, por su parte, tendrá que compartir espacio con la CUP y los comunes después de dejarse 30 escaños y pasar de los 36 de 2017 a los seis actuales.

En la sesión constitutiva de este viernes, que dará el pistoletazo de salida a la XIII legislatura en Cataluña, los diputados recogerán sus actas en la cámara más fragmentada de la Historia con hasta ocho partidos tras la irrupción de Vox el 14 de febrero.