El cambio de voto a última hora de Junts en el pleno del Ayuntamiento de Barcelona respecto al uso de pistolas Taser, ha provocado el cruce de acusaciones entre el grupo municipal independentista y el gobierno municipal liderado por Jaume Collboni.

Cuando parecía que el Ayuntamiento aprobaría el reglamento del uso de las pistolas Taser por parte de la Guardia Urbana de Barcelona, el voto en contra de Junts ha impedido que la medida saliera adelante. Según el líder de Junts en la ciudad, Jordi Martí, el gobierno municipal no ha contado con los sindicatos policiales para presentar el proyecto.

En declaraciones posteriores, el teniente de alcalde de Seguridad, Albert Batlle, ha recriminado que "Junts ha buscado cualquier excusa para torpedear la iniciativa", y no ha confirmado si se volvería a presentar la medida en el próximo pleno.

Como respuesta, Martí ha reprochado "la prepotencia del gobierno municipal". "Batlle ha dicho cosas que no son ciertas. Si estamos como estamos es por culpa del gobierno actual y de los anteriores", ha añadido Batlle, que ha avisado que con "la chulería, la prepotencia y las mentiras" del consistorio liderado por Collboni, "no conseguirán nada".