Imposición del catalán

Barcelona crea la “policía del catalán” para vigilar el uso de la lengua en la ciudad

La nueva comisaria controlará el uso del catalán para dar subvenciones en plena polémica por la imposición del catalán

Marta Silacrú, la comisaria de la “policía del catalán” para vigilar el uso de la lengua en la ciudad
Barcelona crea la “policía del catalán” para vigilar el uso de la lengua en la ciudadLa RazónPropio

El Ayuntamiento de Barcelona creará por primera vez un comisionado para impulsar el uso del catalán en la ciudad, una figura que ha desatado un intenso debate sobre si supone imposición del catalán o una medida necesaria para proteger los derechos lingüísticos.

La polémica surge tras un gag catalanófobo representado durante la presentación del Informe del Observatorio de las Discriminaciones, en un acto municipal. ERC considera que este episodio demuestra la falta de políticas sólidas para garantizar que los ciudadanos puedan expresarse en catalán en espacios públicos y servicios básicos.

ERC presiona a Collboni: nombramiento “urgente”

La líder de ERC en el Ayuntamiento, Elisenda Alamany, ha reclamado el nombramiento inmediato del comisionado, un cargo que, según ha confirmado, será anunciado “en los próximos días” por el alcalde, Jaume Collboni.

La elegida será la periodista Marta Salicrú, exdirectora de Ràdio Primavera Sound, que asumirá un puesto técnico y estratégico: impulsar políticas lingüísticas en catalán para aumentar el uso social del catalán. El cargo estaba pendiente desde mayo y llega por presión de ERC, que había pactado su creación junto con otros dos comisionados (Turismo y Rehabilitación).

Así reaccionaba la periodista ante su nuevo puesto:

¿Policía del catalán o fomento del idioma?

El plan que liderará Salicrú ya genera controversia. Entre sus funciones estará incluir el uso del catalán como criterio en la concesión de subvenciones municipales. En otras palabras, las empresas que aspiren a ayudas deberán demostrar compromiso con la lengua. Para algunos sectores, esto es “imposición del catalán” y un paso hacia la llamada policía del catalán.

Desde ERC, sin embargo, defienden que no se trata de sancionar, sino de garantizar derechos: “Casi el 100% de las discriminaciones lingüísticas en Barcelona se deben a no poder usar el catalán en centros sanitarios”, recordó Alamany.

Un debate que va más allá de la lengua catalana

El caso reabre una discusión recurrente: ¿es una medida justa para proteger la lengua propia o una injerencia que limita la libertad empresarial? Mientras unos lo ven como la creación de una policía de la lengua, otros lo consideran un paso imprescindible para frenar la pérdida del catalán en entornos sociales y administrativos.