Desahucio en Barcelona

Desahucio masivo en Vallcarca: vecinos luchan contra la gentrificación en Barcelona con una manifestación vecinal

El desahucio en Barcelona que afectará a viviendas y comercios en Vallcarca genera tensiones en la comunidad

Espacio que ocupará la futura Rambla Verde de Vallcarca
Espacio que ocupará la futura Rambla Verde de VallcarcaAjuntament

El barrio de Vallcarca, en la parte alta de Barcelona, vive una situación de tensión ante el desahucio masivo que se llevará a cabo mañana. Tres edificios, ubicados en la avenida Vallcarca, serán desahuciados en Barcelona como parte de la ejecución de un plan urbanístico que propone la creación de una “rambla verde”. El desahucio afectará tanto a viviendas ocupadas por vecinos que han residido toda su vida en Vallcarca, como a comercios locales que han sido parte esencial del barrio.

La Asociación Vecinal Som Barri ha convocado una manifestación vecinal en Barcelona en la puerta de los edificios afectados, con el objetivo de frenar el desahucio. Los vecinos denuncian que el proyecto urbanístico favorece el interés privado y contribuye a la gentrificación en Barcelona de una zona tradicionalmente residencial.

El proyecto urbanístico de la rambla verde fue aprobado en 2002, pero ha permanecido paralizado durante años. No obstante, la actual administración municipal, liderada por el gobierno socialista de Jaume Collboni, busca reactivar el plan. El principal objetivo del proyecto es transformar el barrio, crear un gran espacio verde cercano al Park Güell y, según los opositores, facilitar la gentrificación en Barcelona.

Desalojo en Barcelona que "responde a una mejora"

El Ayuntamiento de Barcelona defiende que “el desalojo en Barcelona responde a la necesidad de resolver problemas de infravivienda y mejorar la calidad de vida en el barrio”. La teniente de alcalde Laia Bonet ha asegurado que el objetivo es “sacar Vallcarca de la provisionalidad” y ofrecer a los vecinos un entorno más accesible. Sin embargo, el desahucio masivo de hoy no solo afectará a los hogares de los vecinos, sino también a varios comercios emblemáticos del barrio, que han salido a las calles con pancartas que gritan “Vallcarca para vivir, no para especular”.

La lucha por la preservación de Vallcarca contra la gentrificación en Barcelona está lejos de terminar. A medida que el plan urbanístico avanza, los vecinos siguen defendiendo su derecho a vivir en su barrio sin ser desplazados por proyectos que benefician a intereses ajenos a la comunidad. El futuro del barrio sigue siendo incierto, mientras la resistencia vecinal crece en contra de los planes de transformación impuestos.