El independentismo pacta en Girona y quita la alcaldía al PSC: la CUP dirigirá la ciudad

El independentismo logra retener su feudo de Girona pese a que ninguno de los tres partidos que conformarán el gobierno municipal fue la lista más votada en los comicios del 28 de mayo. La socialista Sílvia Paneque dio la campanada y ganó en las urnas, aunque los resultados de Guanyem –plataforma municipalista integrada por la CUP–, Junts y ERC han hecho posible que los partidos independentistas hayan sellado un acuerdo para arrebatar la alcaldía al PSC y gobernar la ciudad.

Este viernes se ha hecho oficial que el antisistema Lluc Salellas será el alcalde de Girona, mientras que Gemma Geis, exconsejera del Ejecutivo de Pere Aragonès y cabeza de cartel de Junts en la localidad, ocupará el puesto de vicealcaldesa. Quim Ayats (ERC) será segundo teniente de alcalde.

Con este acuerdo, Guanyem, Junts y ERC desbancan a la candidata del PSC. Paneque ganó en votos, aunque empató en número de concejales –con 8– con Guanyem Girona, liderada por Salellas. Gemma Geis logró 6 concejales al frente de la candidatura de Junts, que había ocupado la alcaldía desde 2011, cuando el entonces candidato Carles Puigdemont terminó con 32 años de mandatos socialistas. Por su parte, el candidato de ERC Quim Ayats consiguió 3 plazas en el pleno municipal, y PP y Vox 1 edil cada uno.

Una alianza independentista muy cuestionada por el resto de partidos. El grupo municipal del PSC en Girona criticó ayer que el futuro gobierno de la ciudad es un «engaño» respecto al resultado de las elecciones. A través de un comunicado, el partido recordó que en esta ciudad «nunca» se le había negado el derecho a gobernar a la lista más votada. «Un gobierno no puede ser en contra de alguien y menos todavía en contra de personas independientes que representan la amplísima diversidad de Girona», zanjaron los socialistas en referencia a los perfiles de buena parte de la lista que presentó Paneque.

Por su parte, la candidata del PP por Girona en las elecciones generales, Concepció Veray, calificó el pacto de «foto de la vergüenza». La ciudad tendrá «un alcalde –Lluc Salellas– que, pese a que se ha intentado blanquear, es de la CUP, una persona antisistema que quiere destruir el sistema colocándose en la silla más importante», zanjó.

A Salellas, le acompañará en el área de Presidencia una concejalía sobre la lengua catalana, que dirigirá Núria Riquelme. «En un momento en que hay un claro ataque al catalán, solo hay que ver qué pasa en la Comunidad Valenciana y las Islas Baleares, hay que dar un mensaje alrededor del catalán», aseguró ayer Salellas dejando claro que la lengua será una de las principales bazas del independentismo desde Girona.

La vicealcaldesa y primera teniente de alcaldes, Gemma Geis, llevará el área de Promoción Económica, en la que estará Raquel Robert (ERC) encabezando el ámbito de Trabajo.

Este mañana a las 11:00 está prevista la constitución del nuevo ayuntamiento de Girona. Será el momento en que Salellas reciba la vara de nuevo alcalde de la ciudad y ponga fin al ciclo que inició Carles Puigdemont (Junts) en 2011 tras desbancar al PSC

De hecho, perder el poder en Girona supone un fuerte golpe para los posconvergentes, un revés que incluso el expresidente de la Generalitat ha admitido tras haber ungido como candidata a Gemma Geis, una persona de su círculo de confianza. Marta Madrenas (Junts), la exalcaldesa de la capital gerundense, concurre en las generales del 23-J.

En Tarragona y Lleida, el PSC tiene amarradas las alcaldías tras ganar las elecciones municipales, desbancando así a los exalcaldes de ERC Pau Ricomà y Miquel Pueyo, que dimitieron de sus cargos tras los resultados.