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Cultura

El jardín perdido que renace convertido en música

El Festival de Perelada presenta «Lucos Loci», un espectáculo escénico basado en la obra de Jorn de Précy

El jardín perdido que renace convertido en música EFE

El Festival de Perelada está a punto de abrir sus puertas y algunas de las sorpresas que nos tienen preparada la nueva temporada comienzan a dibujarse. Es el caso del estreno que con motivo de su 39ª edición tendrá lugar el próximo 5 de julio de la mano de una nueva producción musical y escénica titulada «Genius Loci», una propuesta dirigida por el regista Rafael R. Villalobos y protagonizado por el contratenor Xavier Sabata, que se inspira en el libro «El jardín perdido» de Jorn de Précy. «Genius Loci» es una propuesta escénica singular que invita al espectador a perderse en un jardín imaginario.

Inspirado en el «El jardín perdido» (Elba, 2018), que publicó originariamente Jorn de Précy en 1912, el espectáculo es, según explicó Villalobos esta semana, una experiencia sensorial: una travesía íntima hacia un universo interior donde la lógica se diluye y la belleza se esconde entre sombras y silencios. Jorn de Précy fue un personaje singular, jardinero y filósofo inglés de origen islandés, tuvo una profunda influencia sobre el arte de los jardines anglosajones del siglo XX. Estuvo ligado a artistas como William Morris, además de frecuentar algunos de los círculos socialistas y radicales de la Inglaterra de la época victoriana. Con «El jardín perdido», que se presentó con una única edición de mil ejemplares pagados por el propio autor, nos propone un viaje por sus pasiones y sus amistades, con el desaparecido jardín de Greystone como telón de fondo, el mismo que fue admirado por artistas como el francés Claude Monet quien llegó a decir que en él lo salvaje se mezclaba constantemente e intensamente con lo artificial.

«En el espectáculo no hay ningún jardín físico porque el libro no va de eso, va de nuestra relación con la naturaleza, de la escucha, de no imponerse, hay reflexión sobre la naturaleza, el miedo al cambio y la espiritualidad que habita en el caos», precisó Rafael R. Villalobos. El programa musical transita por la música vocal inglesa desde el Renacimiento hasta el siglo XX, con obras de autores de la talla de John Dowland, Henry Purcell, Benjamin Britten y John Williams. En este sentido, «Genius Loci» juega con el tiempo, la voz y el paisaje sonoro para dar vida a la figura de un jardinero solitario y visionario que podría ser, en realidad, nuestro propio reflejo.

Con la complicidad del tiorbista Jonas Nordberg, una puesta en escena poética en la que participa el artista visual Cachito Vallés y una atmósfera atemporal, el espectáculo se articula como una égloga contemporánea: una divagación musical y filosófica que interpela el alma a través de la voz, la palabra y el gesto, resumen los creadores.

El director artístico de Perelada, Oriol Aguilà, definió la presente edición como «un viaje iniciático al paraíso, un homenaje al culto a la jardinería, una de las expresiones más cultas, y en este caso el festival sale de su espacio de confort habitual y hace propuestas de descubrimiento, nada convencionales, más híbridas», cuyo primero de los encargos es «Genius Loci».

Por otro lado, Villalobos también comentó que el punto de partida es este libro de 1912 que reproduce las palabras de un personaje con el que conectó, «palabras sobre su pasión por la jardinería, sobre Greystone, el jardín que creó y que no se sabe si existió, del miedo por un mundo que se está rearmando, a punto de vivir una gran pandemia, y que se parece al mundo actual». A este respecto, el reto, como reconoció Villalobos, era poder escribir un espectáculo sobre un libro que es una combinación de «un diario/ensayo/tratado».

Xavier Sabata agradeció al festival la libertad con la que han trabajado y subrayó que en «Genius Loci» se ha sentido cocreador, «algo que es muy difícil en el mundo de la ópera, aunque no era así antes del Romanticismo». Sabata considera que el texto reelaborado por Villalobos «ha destilado, ha concentrado el libro original de una manera poética y con un hilo conductor».

Jonas Nordberg, que participa como instrumentista de archilaúd y actor, fue consciente desde el principio de que tendría que participar en la puesta en escena y no solo en tocar, pero lo que imaginaba, ha confesado, es que tendría que hablar en español. «Ha sido un proceso divertido ir descubriendo cuál era mi papel y un reto encontrar el equilibrio entre la parte actoral y la de intérprete musical».

El proyecto planteó un reto similar al violagambista Liam Byrne, que vio el texto «muy evocador» y tuvo que superar la dificultad de «tocar música del siglo XVII de manera historicista en un lado del escenario y en otros momentos creando espacios acústicos con Jonas Nordberg».

Cachito Vallés avanzó que en «Genius Loci» se plantea «un espacio escénico que está vivo, con elementos industriales y materiales muy vivos, pero manteniendo el minimalismo». En este punto, Villalobos advirtió al público: «Que nadie espere ver un jardín bucólico; y aunque hay minimalismo, también hay algo de apocalíptico».