Los juicios rápidos se enquistan en Cataluña con años de retraso

El conseller de Justicia, Ramon Espadaler, estableció como prioridad descongestionar de los juzgados catalanes, y se comprometió a destinar «todos los recursos y los esfuerzos».

En las recientes reuniones con la jueza decana de Barcelona, Cristina Ferrando, y con la fiscal jefa de Barcelona, Neus Pujal, el conseller trasladó «la voluntad y el compromiso firme del Govern de trabajar en soluciones efectivas y consensuadas ante los grandes retos que tiene por delante la Administración de justicia, como superar la situación de congestión de los juzgados», una cuestión prioritaria para el actual equipo, apuntaron.

Por ejemplo, Espadaler manifestó la necesidad de reducir los plazos de señalamiento de los juicios rápidos y de los juicios por faltas leves y para conseguirlo se comprometió a destinar «todos los recursos y los esfuerzos que estén a su alcance».

Precisamente, Ferrando alertó de que en Barcelona se están señalando juicios rápidos penales para 2026, cuando por ley se deberían fijar en quince días, y reclamó que se creen «nuevos órganos con urgencia» para agilizar la respuesta a estos casos.

Avisó de que en 2023 recibieron «20.000 asuntos más» que en el año anterior, y sostuvo que esto incrementa el tiempo de espera para celebrar juicios.

«Tenemos un tsunami de asuntos, cada año es un volumen superior al anterior. Vamos haciendo lo que se puede», lamentó la magistrada decana, que aseguró que los planes de refuerzo que se implementaron son parches.

Explicó que, en base a los estudios de cargas de trabajo del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para cada tipo de juzgado, Barcelona necesitaría «60 nuevas unidades judiciales para tener una buena respuesta», lo que asegura que supondría abrir dos nuevos edificios en la Ciudad de la Justicia.

«Somos realistas, es imposible contar con este incremento de los juzgados a corto plazo», reconoció Ferrando, que aseguró que hay seis juzgados prioritarios ampliar: dos penales, uno de ejecutorias, dos de primera instancia, uno de lo social y uno de concursal.

Mostró preocupación por la multirreincidencia en Barcelona, ya que la última reforma que hubo en esta materia «dificulta que haya un juicio rápido», ya que debe haber una investigación previa que tenga en cuenta los antecedentes penales y analice el valor de los objetos sustraídos para determinar si es un juicio rápido o pasa a ser uno menos grave.

La magistrada decana de Barcelona propuso la creación de un servicio para dar apoyo a los juzgados en la tramitación de estos asuntos, y añadió que están trabajando para crear «una oficina para filtrar estos casos».

Explicó que de media hay 48 juicios por delitos leves inmediatos al día en Barcelona, de los cuales unos ocho no se celebran como inmediatos porque se debe hacer esta investigación previa, lo cual «ralentiza mucho» el proceso, por lo que insistió en que se necesitan más juzgados de lo penal o alguna oficina paralela que de apoyo.

En los juzgados de lo penal, afirmó que hay cuatro jueces de apoyo, que dictan «más de 2.000 sentencias de juicio rápido al año», pero lamentó que el incremento de asuntos de este año fue absorbido por esos cuatro jueces y sigue habiendo una tendencia previa de retrasos.

La jueza decana sostuvo que los juzgados de primera instancia de Barcelona reciben «un volumen de ingreso muy superior al que puede ser asumido de manera racional», y añadió que se necesitaría crear 23 nuevos juzgados para resolver los asuntos que les llegan en un tiempo razonable.

Explicó que se implementaron medias de apoyo como la incorporación de jueces de refuerzo a los 50 juzgados de primera instancia, pero insistió en que es «insuficiente».

También alertó de que la complejidad de los casos relativos a la aplicación de la Ley de Vivienda incrementó, ya que es «muy complicado» aplicar la norma, a la que se le suman las moratorias aplicadas durante la pandemia.

En los juzgados de lo mercantil, los asuntos en materia concursal ocupan el 80% de los casos y están «saturando los juzgados para atender otras materias», por lo que la jueza decana señaló que en estos momentos están trabajando en una propuesta que trasladarán al CGPJ para crear una unidad de tramitación concursal, y también están estudiando incorporar la Inteligencia Artificial a la tramitación de pleitos sencillos.