Efectos de la pandemia

Menos de un 8% de las personas con covid persistente se recupera en los dos primeros años

Un estudio pone de manifiesto que son los hombres con estudios superiores los que menos probabilidades tienen de desarrollar este síndrome y quienes antes se recuperan del mismo

Este estudio de seguimiento de la evolución clínica de personas con covid persistente es de los más grandes y prolongados llevados a cabo hasta el momento
Este estudio de seguimiento de la evolución clínica de personas con covid persistente es de los más grandes y prolongados llevados a cabo hasta el momentoIrsiCaixa

Entre un 5% y un 10% de las personas que pasan la COVID-19 siguen sufriendo una amplia variedad de síntomas meses después de la infección. Es lo que se conoce como Condición Post-COVID-19 o covid persistente, una enfermedad que puede llegar a ser invalidante, lo que afecta directamente al paciente, pero también tiene un impacto en el sistema de salud.

En este contexto, los resultados de un estudio desarrollado por la Unidad de covid persistente del Hospital Germans Trias, la Fundación Lucha contra las Infecciones y el Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa -centro impulsado por la Fundación "la Caixa" y el Departamento de Salud de la Generalitat de Cataluña- que acaba de publicar la revista The Lancet Regional Health-Europe arrojan ahora más información acerca de esta enfermedad, sobre la que a día de hoy aún existe mucho desconocimiento, y ponen de manifiesto la importancia de seguir investigando este síndrome, así como la necesidad de que los sistemas de salud europeos encaren este problema y estén preparados para gestionar este enfermedad.

Entre los principales resultados que arroja este estudio, que se ha llevado a cabo con una cohorte formada por 548 personas que pasaron COVID-19 hace más de dos años, de las cuales 207 se recuperaron completamente y 341 desarrollaron covid persistente, cabe señalar aquellos relacionados con los factores que predisponen a desarrollar covid persistente.

Factores de riesgo

En este sentido, Marta Massanella, investigadora principal de IrsiCaixa, señala que "son los hombres con estudios superiores los que tienen menos probabilidades de desarrollar covid persistente", mientras que "las mujeres, las personas con antecedentes de enfermedades inmunitarias o que padecen fatiga, taquicardia, ahogo o alteraciones neurodegenerativas y neurosensitivas durante la COVID-19 aguda tienen mayor riesgo de desarrollar el síndrome".

Estos mismos patrones se reflejan en lo relativo a la recuperación de los pacientes. Y es que como pone de manifiesto la investigación "solo un 7,6% de las personas con Condición Post-COVID-19 se recupera en los dos primeros años de sufrir el síndrome". "Se trata de una tasa de recuperación muy baja", señala Marta Massanella, quien al respecto indica que "en general, estos pacientes que se recuperan son hombres que han estado hospitalizados, en la UCI".

Ellos se recuperan antes

Es decir que "aquellos pacientes que padecieron un COVID grave son los que tienen más posibilidades de recuperarse y eso puede deberse a que al estar en la UCI, por el simple hecho de estar mucho tiempo inmovilizados o tener ventilación mecánica, desarrollan unos síntomas a largo plazo que se solapan mucho con el covid persistente". Por contra, "las mujeres se recuperan menos" y síntomas como el dolor muscular, la disminución de la atención, la disnea o la taquicardia se asocian a una menor probabilidad de recuperación.

Así pues, ante la continuidad de la transmisión del SARS-CoV2 y dada la baja tasa de curación del síndrome, todo apunta a que se producirá una progresiva acumulación del número de personas que padecen covid persistente, de ahí la necesidad de que los sistemas de salud se prepararen para hacer frente a la demanda existente de una enfermedad que sigue en aumento. "Hay muchas personas afectadas por esta enfermedad, de manera que hay que seguir a estos pacientes, no dejarles desamparados y crear unidades de Post-COVID en hospitales, pero sobre todo en Centros de Atención Primaria, que es donde hay que tratar esta enfermedad", señala Massanella.

Por último, este trabajo ha permitido a los investigadores subclasificar el covid persistente en tres grupos de severidad. Tal y como explica Massanella, "el primer grupo padece sobre todo fatiga y tiene pocos síntomas persistentes, el segundo grupo, al margen de la fatiga, tiene otros síntomas persistentes como la niebla mental o la falta de atención, disnea, dolor de pecho o taquicardias, pero realmente el grupo que está más grave es el tercero, que es minoritario. Estos pacientes tienen más de 15 síntomas al mismo tiempo y son sumatorios, es decir que se suman a los síntomas de los otros dos grupos". "Y las personas que se recuperan antes pertenecen al grupo uno, el menos grave", concluye la investigadora