Posconvergencia

El PDeCAT, en el abismo: decidirá tras el verano si se disuelve

En las generales apenas sumaron 31.000 votos. No volverá a concurrir de repetirse los comicios

El presidente del PDeCAT, David Bonvehí, en una imagen de archivo
El presidente del PDeCAT, David Bonvehí, en una imagen de archivoAgencia EFE

El PDeCAT se asoma al abismo. Los herederos naturales de Convergència, el partido que debía aspirar a gobernar la Generalitat se ha esfumado del Parlament y del Congreso siete años después de su constitución, en julio de 2016. La ruptura con Junts y Carles Puigdemont fue definitiva y los malos resultados en las elecciones generales del 23J –perdió sus cuatro escaños– pueden suponer su estocada definitiva, una decisión que la cúpula acabará tomando tras las vacaciones, en una asamblea extraordinaria en septiembre.

Así lo aseguraron fuentes de la formación consultadas por Europa Press, que explicaron que se han tomado este mes de agosto para reflexionar sobre qué deben hacer en el seno de la posconvergencia tras el fiasco de las generales. Lo que sí es seguro es que en caso de una eventual repetición de los comicios, el PDeCAT no volverá a concurrir. El 23J se presentó con el nombre de Espai CiU y con Roger Montañola, ex de Unió Democràtica, como candidato. La lista fracasó al lograr tan solo 31.000 votos en Cataluña, muy lejos del 1% necesario para entrar en el Congreso de los Diputados.

Sobre la mesa hay tres caminos a tomar en septiembre: la disolución definitiva, la enésima refundación del espacio o bien continuar la actividad como hasta ahora. Este última serviría para dar cobijo a los casi 200 concejales logrados en las pasadas elecciones municipales en coalición con Ara Pacte Local. También a los militantes que se quedaron en la formación –el más ilustre es el expresidente Artur Mas, por ejemplo–, los representantes en consejos comarcales y los dirigentes orgánicos.

En total, la formación tiene 13 alcaldías, la mayoría en poblaciones pequeñas. La más destacada es la de Mollerussa, una capital de comarca de la provincia de Lleida, que encabeza el dirigente Marc Solsona.

Otro de los aspectos a tener en cuenta será la situación económica del PDeCAT. Después de las elecciones catalanas, en febrero de 2021, se hizo un plan económico para poder pagar al personal y a los proveedores y que se ha ido cumpliendo, aseguran. La campaña de las elecciones generales no supuso un coste extra ya que el PDeCAT tenía los derechos electorales asignados de los últimos comicios de 2019, cuando se presentó bajo el paraguas de Junts y Carles Puigdemont.

Antes del inicio de la campaña electoral, el expresidente de la Generalitat Artur Mas –asociado del PDeCAT– defendió que el partido no tenía que presentarse a las generales, y el actual líder de TriasxBarcelona, Xavier Trias, dejó la militancia en octubre del año pasado para sumarse a Junts. Mas sí mantiene todavía el carné de la formación, aunque en alguna que otra ocasión se ha mostrado partidario de acabar integrado en Junts.

Actualmente, el presidente del PDeCAT es David Bonvehí, con un carácter más representativo e institucional; el secretario general adjunto es el mencionado Marc Solsona, y el secretario de Organización es Genís Boadella.

La refundación parece complicada dados los fracasos acumulados en el último lustro, con proyectos fallidos como el de Centrem o el Partit Nacionalista de Catalunya, con Marta Pascal a la cabeza.

El PDeCAT también quedó fuera del Parlament en 2021 a pesar de recibir 77.229 votos, el 2,72% del total.