El PP pide a Ribó un “presupuesto de guerra” para Valencia

El Grupo Municipal Popular ha propuesto al alcalde de la ciudad, Joan Ribó, la formación inmediata de una comisión permanente de Hacienda para elaborar un nuevo presupuesto municipal que “nos prepare para la guerra que estamos viviendo contra la crisis sanitaria que azota a toda España” y “para el día después de la pandemia”, en palabras de su portavoz, María José Catalá.

Para la portavoz popular, es necesario tomar medidas que puedan ayudar a las familias valencianas afectadas por esta crisis, por lo que ha reclamado que “se convoque para la semana próxima la comisión de Hacienda" para estudiar medidas fiscales que se pueden poner ya en marcha y destinar las mayores partidas a estar preparados para el día siguiente que se termine el estado de alarma.

Catalá, quien se ha mostrado muy crítica con Ribó por la falta de previsión e ir con retraso de 15 días en la crisis sanitaria, ha explicado que ahora tiene una oportunidad de ponerse a la cabeza con un presupuesto municipal para este tiempo de “guerra”.

“Debemos ser previsores y tener ya preparado el presupuesto alternativo con partidas muy concretas para dar apoyo a quienes más lo necesiten y ser los mejor dispuestos para afrontar la crisis económica que ya vivimos en la ciudad”.

La portavoz Popular señala que no podemos ir haciendo modificaciones de créditos todas las semanas y debemos comenzar ya a diseñar el presupuesto municipal que nos deje en mejor situación para el día después de la pandemia. Entre las propuesta de los populares lo primero que debe hacer el departamento de Hacienda es estudiar una bajada de impuestos municipales y bonificaciones para aquellos más afectados por la crisis.

Para la líder Popular en la ciudad de Valencia “la mejor política social es conseguir el empleo, y por ello todas las ayudas, bonificaciones y subvenciones deben ir dirigidas al mantenimiento de los puestos de trabajo cuando finalice este parón en seco de nuestra economía”.

El PP insiste en la necesidad de paralizar la subida de impuestos municipales y bonificar el 50% el IBI a los locales comerciales, autónomos, pequeñas y medianas empresas y comercios de hostelería, bares, restaurantes y cafeterías.