La Comunitat Valenciana decreta el toque de queda y prohíbe las reuniones de más seis personas y la venta de alcohol a partir de las diez de la noche

La Conselleria de Sanidad ha aprobado una resolución con las medidas que complementan la imposición del toque de queda en la Comunitat Valenciana. Además de restringir la movilidad entre las doce de la noche y las seis de la mañana, se limita a seis el número máximo de personas que pueden reunirse por motivos familiares o sociales, tanto en espacios públicos como privados, entre personas no convivientes.

Todas estas medidas estarán en vigor hasta el próximo 9 de diciembre.

En los establecimientos de hostelería y restauración se prohíbe el consumo en la barra y las mesas podrán ser de un máximo de seis personas. Todos los establecimientos deberán cerrar a medianoche.

Además, queda prohibida la venta de alcohol entre las diez de la noche y las ocho de la mañana, a excepción de la hostelería y la restauración.

La resolución pide posponer las actividades familiares o sociales que no sean imprescindibles, así como limitar la actividad social en las próxima semanas.

En la franja del toque de queda solo podrán transitar por la calle las personas que vayan a trabajar, que vuelven de trabajar o que se desplacen por causa de fuerza mayor con una urgencia médica o para atender a una persona dependiente.

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha realizado una declaración institucional para explicar por qué se adoptan estas medidas. Ha incidido en que dos de cada tres brotes tienen origen social, con una gran incidencia del ocio nocturno no reglado.

“En solo tres meses, la Conselleria de Justicia ha recibido más de 20.000 actas de propuesta de sanción para incumplir las medidas de prevención ante la Covid. Y el foco de contagio del 90 por ciento de ellas derivan de reuniones sociales y de fiestas contrarias a la normativa sanitaria que se celebran en chalés, viviendas o casas de campo. Todo ello forma parte de nuestra manera de entender la vida. Y está bien; nos gusta ser así. Pero ahora no se puede hacer. Ni tampoco tolerar”.

Así, aunque ha asegurado que la mayoría de la sociedad está haciendo un “enorme esfuerzo”, ha solicitado que cesen las actitudes irresponsables que ponen en peligro al resto.

Puig ha remarcado que a pesar de que la Valenciana es la comunidad peninsular con la incidencia más baja del virus, los casos detectados esta semana se han duplicado con respecto a los de la semana anterior.“Por eso, consideramos urgente reforzar las medidas que frenen la propagación del virus y protejan la salud. Es inaplazable evitar la concentración y deambulación de personas en la franja nocturna en que se producen botellones y fiestas privadas en domicilios particulares.

“La situación empeora y hay que reaccionar con contundencia. Porque perder tiempo, en este momento, significa perder vidas, empleos y bienestar".

Puig ha explicado que la resolución, que se publica de manera inmediata, será enviada al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) para su ratificación. Cambia así el procedimiento anunciado el jueves, cuando se dijo que se esperaría al visto bueno del TSJCV antes de decretar su entrada en vigor. El motivo se debe a que la Generalitat da por seguro que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, declarará mañana domingo el Estado de Alarma que sí permite restringir un derecho fundamental como es la movilidad.

En este sentido, Ximo Puig, ha dicho que solicitará al Gobierno la puesta en marcha de este instrumento jurídico, "el más útil para afrontar esta difícil coyuntura desde la unidad de acción y con espíritu de cogobernanza”.

Ha remarcado que la Generalitat es partidaria de una solución común para toda España. “Una solución modulable, según la situación de cada territorio, para afrontar mejor esta segunda ola de la pandemia”, pero ha remarcado la necesidad de lograr un marco legal que permita a las autonomías adoptar ciertas restricciones. “No podemos estar más pendientes de los tribunales que de los hospitales”.