El IRPF de izquierda a derecha, ¿castigar a los ricos o premiar a la clase media?

Propuestas fiscales hay como colores, para todos los gustos. Solo en el arco parlamentario valenciano cada partido propone una alternativa. El PP quiere que se baje un siete por ciento el IRPF a las rentas inferiores a 30.000 euros, Ciudadanos medio punto a las de menos de 50.000 y el PSPV, Compromís y Unides Podem- tras presentar por separado sus propuestas- han pactado una subida para aquellos que ingresan más de 120.000 euros.

Este incremento, al que en un principio se negaron los socialistas, está dividido en diferentes tramos. A los que ganan hasta 120.000 euros se les incrementa el tipo aplicable hasta el 25,5 por ciento; el de los que cobran hasta 140.000 se situará en el 27,5 por ciento y por último, aquellos que perciben más de 175.000 euros se les aumenta el porcentaje hasta el 29,5 por ciento.

Este es el nuevo régimen fiscal que regirá en la Comunitat Valenciana. Así lo recoge la ley de Acompañamiento de los Presupuestos de la Generalitat de 2021 que se aprobó esta semana en la Comisión de Economía. El PP y Vox votaron en contra y Ciudadanos se abstuvo.

Desde el Botànic afirman que esta subida de impuestos únicamente afecta a los ricos, pero la oposición insiste en que la Generalitat castiga a las rentas medidas.

El partido de Toni Cantó defiende que la bajada de impuestos que ellos proponen igualaría a los valencianos con los ciudadanos de aquellas autonomías con menor carga fiscal y afirman que la Comunitat Valenciana es de las que más paga en el tramo autonómico del IRPF.

Por su parte, el PP defiende que su propuesta ahorrará a los valencianos entre 90 y 100 millones ya que afectará también a aquellos que ahora mismo están exentos de realizar la declaración porque cobran menos de 20.000 euros al año. Su bajada de tipo también beneficiaría a los que perciban menos de 14.000 euros por una pensión o un subsidio, como puede ser el paro.

Este el escenario fiscal que se debate en la Comunitat Valenciana mientras prosigue el rifirrafe político después de que el Gobierno central haya anunciado que va a poner en marcha una armonización de impuestos para limitar el «dumping fiscal» que realiza la Comunidad de Madrid, tal y como denuncia constantemente el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig.

Pagar por pisos vacíos

Además de subir el IRPF el modelo «botánico» de impuestos para el próximo año recoge un nuevo gravamen para aquellos que tengan pisos vacíos.

PSPV, Compromís y Unides Podem también han acordado la creación de esta nueva tasa que tendrán que abonar los denominados «grandes tenedores de vivienda» y que, según la Ley de la Función Social Pública de la Vivienda, aprobada en enero de 2017, son aquellos que poseen más de diez viviendas.

Sin embargo, su aplicación no será inmediata. Para hacerlo es necesario un registro de pisos vacíos que, a pesar de estar anunciado desde 2015, no se ha creado.

Fuentes del Departamento de Vivienda que dirige el vicepresidente Rubén Martínez Dalmau, explicaron que se trabaja en la redacción de un decreto para regularlo y que prevén que su redacción esté preparada a principios de 2021.

Los grupos que conforman el Botànic también han dado el visto bueno a un impuesto medioambiental sobre instalaciones del transporte de energía eléctrica.