Política
Valencia sustituirá el monolito de Ribó del 15-M por otro menos sectario
El PSPV con el apoyo del PP tumba la aspiración del alcalde de dedicar la plaza a los indignados
El pleno del Ayuntamiento de Valencia aprobó ayer una moción impulsada por el PSPV para sustituir el monolito que hace unos días inauguró el alcalde Joan Ribó en homenaje a 15-M en la plaza del Ayuntamiento por una escultura que represente «la pluralidad y la diversidad de la ciudad».
El texto de los socialistas contó con el apoyo de Ciudadanos, la abstención del PP y el voto contrario de Vox y de su socio de gobierno, Compromís, que lamentó la «estrategia conjunta de PSOE, Vox, PP y Ciudadanos para retirar el homenaje a los movimientos sociales impulsado desde el gobierno municipal».
El portavoz de los socialistas en Valencia ciudad y concejal de Hacienda, Borja Sanjuán, explicó que la nueva escultura representará la pluralidad de movimientos sociales, cívicos y culturales de la ciudad y saldrá de un concurso entre artistas y escultores de prestigio.
«El objetivo de la moción es que Valencia tenga un monumento identitario, singular y único que aporte valor a la plaza y represente a todas las realidades sociales, cívicas y culturales. El monumento resultante sustituirá al actual monolito que dejaba fuera a una parte importante de las realidades de esta ciudad», explicó.
Para Sanjuán, la moción «es una oportunidad para hacer las cosas bien y debemos aprovecharla para mandar un mensaje de que el espacio público es de todos porque no es de nadie y de todos los partidos».
«Incluso Compromís y Vox, que han votado en contra de la propuesta, deberían remar para que Valencia y especialmente en estos momentos tan difíciles no solamente sea la capital de la responsabilidad sino también del consenso», agregó.
El concejal de Hacienda reivindicó que ahora la Plaza del Ayuntamiento «es la plaza del 15-M y de todos los movimientos sociales y culturales que llevan décadas trabajado por Valencia».
Recordó que los socialistas registraron la moción después de «semanas intentando hablar, pactar y acordar con Compromís el texto para solucionar el conflicto que han generado en torno al monolito que han instalado en la plaza» y que fue «una decisión unilateral, que no se acordó con nadie en el Ayuntamiento».
Sanjuán subrayó que tras semanas de debate se ha logrado tener una oportunidad de hacer las cosas mejor, «con consenso, pero también con diseño».
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