Hacienda
Mazón recela del apoyo de Vox a los presupuestos
La Generalitat se enfrenta a sus segundas cuentas anuales con la posibilidad de una prórroga si los de Abascal no les apoyan
El año pasado el recién estrenado Consell de Carlos Mazón se enfrentaba a la elaboración de sus primeros Presupuestos de la Generalitat valenciana con el reto de cuadrar unas cuentas con una elevada deuda, y consensuarlas con Vox, sus entonces socios de Gobierno. Lo cierto es que lo primero fue mucho más complicado que lo segundo, ya que los consejeros de la formación de Abascal -Vicente Barrera, José Luis Aguirre y Elisa Núñez- no plantearon ningún problema, más bien al contrario.
Sin embargo, este año, y tras la salida de los tres miembros de Vox del Gobierno de la Generalitat, el Gobierno del PP se enfrenta a un nuevo escenario: la posibilidad de que la Ley de Presupuestos no obtenga el sí de Les Corts en el caso de que sus exsocios no las apoyaran -se da por hecho que Compromís y PSPV votarán en contra, por lo que el PP necesita el voto a favor de los 13 diputados de Vox-.
Aunque no hay motivos para pensar que los de Vox pudieran votar en contra o abstenerse -los Presupuestos necesitan una mayoría de «síes» para ser aprobados- tampoco se puede descartar esta opción, dada la imprevisibilidad que ya ha demostrado este partido durante los últimos meses, sobre todo después de que su presidente rompiera todos los Gobiernos autonómicos en los que gobernaba con el PP por la crisis de los menores inmigrantes.
Dada esta situación, la propia consellera de Hacienda de la Generalitat valenciana, Ruth Merino, aseguró ayer que sería una «irresponsabilidad» por su parte no contemplar una posible prórroga de los Presupuestos, ya que desconocen qué votarán el resto de grupos del hemiciclo.
«Nuestra intención es dialogar y consensuar, hacer todo lo posible para que se aprueben, pero sería irresponsable no valorar la posibilidad de que Vox no se abstuviese. La prórroga -de los presupuestos de este año- es un escenario que hay que contemplar», señaló la consellera en la rueda de prensa posterior al primer pleno del Gobierno valenciano tras las vacaciones de agosto.
Aseguró que la intención del Consell es presentar los presupuestos «en tiempo y forma», es decir, antes del 31 de octubre, y garantizó que las cuentas «se adaptarán a las necesidades de los ciudadanos y volverán a ser sociales a pesar de la falta de recursos por parte del Gobierno».
Preguntada por la posibilidad de que la ley incluya nuevas rebajas fiscales, señaló que estas «forman parte de la hoja de ruta del Gobierno valenciano» y añadió que la Comunitat es «una de las regiones con mayor presión fiscal y queremos seguir tomando medidas para aliviar a las rentas medias y bajas».
«No son medidas a corto plazo ni todas de golpe, pero estamos convencidos de que con el tiempo y de forma sensata se conseguirá, y que redundarán en más cohesión social», apuntó la consellera, quien no dio más detalles, aunque sí indicó que hay que aprovechar el buen ciclo en el que se encuentra la economía.
Acerca de si la nueva financiación acordada para Cataluña -concierto o cupo- podría condicionar la elaboración de las cuentas de la Comunitat Valenciana, Merino señaló que «en principio ese culebrón del cupo catalán no debería afectar», sino que su tramitación en el Congreso «transcurrirá de forma paralela a la elaboración de los presupuestos».
Además recordó que, a diferencia del año pasado, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, trasladó a las comunidades autónomas en el último Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) del pasado 15 de julio la cantidad que recibirán en concepto de entregas a cuenta para el año que viene, por lo que, salvo sorpresas de última hora, no tendrán dicha incertidumbre.
En este sentido, el Gobierno trasladó a la Comunitat Valenciana en dicha reunión que el año que viene la región percibirá un total de 13.974 millones en entregas a cuenta, la mayor cifra de la historia.
En cuanto a la cantidad adicional que la Generalitat debe recibir tras la actualización de las entregas a cuenta que realizó el Ministerio el pasado mes de julio, la consellera confirmó que en dicho mes y en el actual se han cobrado 91 millones más procedentes del Estado, y a partir de septiembre se percibirán los 500 restantes resultado de la diferencia entre lo que se cobró entre enero y junio y lo que se debería de haber recibido.
El presidente derrocha sintonía con el socialista Bielsa
El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, efectuó ayer un inteligente movimiento político que, premeditado o no, resultó de lo más interesante. Mazón visitó la localidad valenciana de Mislata, cuyo alcalde, Carlos Fernández Bielsa, fue uno de los rivales de la actual secretaria general de los socialistas valencianos, Diana Morant, durante el proceso de designación al cargo. Bielsa fue descartado -junto con Alejandro Soler- y el resto ya es historia.
El presidente Mazón no solamente visitó la localidad y se reunió con el primer edil en un encuentro en el que reinó la armonía, sino que además realizó tres importantes anuncios de inversiones para el municipio. Un nuevo centro de salud, cuya inversión superará los 4 millones de euros, un auditorio renovado y un mejorado punto de acceso para la localidad. En señal de la cordialidad reinante entre ambos, Bielsa pidió a Mazón que «las instituciones estén unidas» para «construir un nuevo modelo de financiación» y, aunque reconoció que la Comunitat necesita un nuevo sistema de reparto de los fondos, recordó que el Gobierno de Sánchez ha invertido en la Comunidad más que en toda la historia.