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Día mundial

Sergei Polunin, el fan de Trump y Putin que maravilla al mundo del ballet

El 19 de octubre se celebra el Día Mundial del Ballet, una de más prestigiosas disciplinas de la danza

El bailarín Sergei Polunin (en la imagen, en el documental «Dancer») ha sido rechazado por la Ópera de París
El bailarín Sergei Polunin (en la imagen, en el documental «Dancer») ha sido rechazado por la Ópera de Paríslarazon

El Lago de los cisnes, el Cascanueces o El Quijote son solamente algunos ejemplos de los más famosos ballets que se representan en el mundo. Miles de niñas y niños sueñan con poder bailar ante el público alguna de estas obras mientras siguen la melodía. Junto a ella, además, realizan saltos y giros imposibles para la mayoría de los mortales.

Hoy, 19 de octubre, se rinde homenaje a una de las expresiones artísticas más reconocidas en el mundo y que, desde el 1 de octubre 2014 celebra este Día Mundial. Para ello, las cinco grandes compañías de ballet a nivel mundial harán varias actividades como clases en vivo o representaciones de forma online.

El ballet, una de las disciplinas más delicadas y distinguidas del mundo, también cuenta con una gran dosis de esfuerzo y sacrificio. No es sencillo aguantar la emoción viendo a grandes bailarines representar algunas obras y menos si se trata de alguno tan reconocido como Sergei Polunin.

Genio y fan de Putin

Polunin no es un bailarin común y la polémica ha rodeado toda su trayectoria. Este ucraniano nacido en 1989 en Jersón, situada al sur del país, ha logrado la mayoría de logros que un bailarín puede llegar a soñar cuando empieza en el ballet.

Su afición empezó bien temprano. Polunin, empezó a bailar muy pequeño y ya en 2003, con apenas 13 años, se unió a la British Royal Ballet School. Allí, se labró una gran fama lo que le llevó a los más alto cuando dio el salto a Inglaterra.

A los 19 años, Polunin, se convirtió en el bailarín más joven en lograr el status de principal en el Royal Ballet de Londres. Actualmente, además es considerado uno de los bailarines principales de la prestigiosa compañía rusa Teatro Musical Académico de Stanislavski y Nemiróvich-Dánchenko de Moscú.

Su precoz carrera le convirtió enseguida en uno de los más reconocidos bailarines alrededor del mundo. En 2010 y 2011 fue nombrado por “Critics’ Circle National Dance Awards” mejor bailarín masculino del año, lo que le acabó de consagrar dentro del mundo de la danza.

Aunque su fama es irrefutable, Polunin cuenta con grandes detractores debido a sus polémicas y referentes. Un retrato del presidente ruso, Vladímir Putin, preside el centro de su pecho con un tatuaje que demuestra la gran admiración del bailarín hacia el dirigente.

Así las cosas, Polunin, ha llegado a felicitar por su cumpleaños a Putin en las redes sociales con una foto en primer plano de este y con una gran dedicatoria hacia el. En el mensaje en la red social Instagram, se puede leer: “Hoy es uno de los días más importantes en la historia. Una fuerte alma nació. Dios envió a un ángel. No importa cuánto lo intente la maldad, son débiles y no pueden tocar la luz pura que brilla de Putin”.

Aunque este mensaje y otros no contenten a todo el mundo, Polunin defiende a ultranza al presidente ruso y su forma de mandar. Pero el bailarín también cuenta con polémicas por otros motivos. Una salida precipitada y sin dar explicaciones de Londres, problemáticas con las drogas y relaciones fallidas han sido ejemplos de la vida del genio ucraniano.

Además, para continuar con su férrea defensa de los ideales políticos, Polunin, durante la campaña de las elecciones americanas se volvió defensor de Donald Trump lo que le generó nuevas enemistades, esta vez en Estados Unidos.

Día Mundial del Ballet

Polunin es solo uno de los ejemplos más relevantes del mundo de la danza que hoy, por octava vez celebra su Día Mundial. Nacido en Italia durante la época del Renacimiento Italiano en el Siglo XV, este se ha convertido en una de las más prestigiosas disciplinas.

Expandido a Francia gracias a los Medici apareció el Ballet de la Corte, que utilizaba la literatura y música como recursos para entretener a los aristócratas. Su expansión mundial fue imparable y, aunque se popularizó, sigue representando una elegancia muy difícil de alcanzar.

El ballet, incluso, fue el único arte moderno que Adolf Hitler no llegó a prohibir debido a su gran reputación. Este, además, se ha mostrado representado en diversas películas como Ballerina, Cisne negro o la reconocida Billy Elliot.

El ballet, además, destaca por ser una danza con gran demanda física y mental. Uno de los principales beneficios del ballet que se destacan son el desarrollo de la musculatura del cuerpo, así como el desarrollo de la conciencia temporal y espacial.