Entrevista
La cantante de Florence and the Machine cuenta que estuvo a punto de perder la vida en un embarazo fallido
La artista también denuncia el sexismo en la industria musical
La británica Florence Welch, líder de Florence and the Machine, ha contado en una entrevista con el medio británico The Guardian que sufrió un embarazo ectópico que le provocó una hemorragia interna y la llevó a una operación de urgencia en la que le extirparon una trompa de Falopio. “Lo más cerca que estuve de crear vida fue lo más cerca que estuve de la muerte”, explicó. Tras la cirugía, reconoce sentirse “más obsesiva y frágil”, pero también más fuerte. Su próximo disco nace de esa experiencia límite y convierte la música en un medio de sanación.
Su nuevo álbum, Everybody Scream, nace directamente de aquella experiencia límite. La intervención marcó un antes y un después en su trayectoria. “Cada vez que hago un disco siento que muero un poco. Y esta vez casi muero de verdad”, reconoció.
Con canciones como One of the Greats y Music By Men, Welch cuestiona abiertamente los dobles estándares de la industria musical y denuncia la falta de apoyo a las mujeres artistas. “Estaba furiosa por lo poco respaldada que me sentí en mi propio sector”, afirmó. También recordó cómo, a lo largo de su carrera, su estilo vocal y la intensidad de sus actuaciones fueron interpretados desde un prisma sexista: sus gritos y su fuerza expresiva sobre el escenario se consideraron en ocasiones un exceso, en lugar de entenderse como parte de su identidad artística.
En el proceso de composición, Welch se sumergió en un amplio abanico de referencias. Desde textos de místicas medievales hasta la cultura pop (con alusiones a personajes como Buffy, cazavampiros), pasando por consultas en el Warburg Institute, un centro de investigación de la Universidad de Londres especializado en historia cultural y símbolos, o incluso sesiones con una curandera a la que denomina “la bruja del útero”.
Desde la publicación de su disco debut "Lungs" a los 22 años, Welch ha desarrollado una trayectoria marcada por la ambición y la constancia. Ha encabezado festivales tan icónicos como Glastonbury y colaborado con artistas internacionales como Taylor Swift, consolidándose como una de las voces más reconocibles del indie británico.