Cine

Diez películas que nos preparan para el apocalipsis nuclear

Ante la amenaza de Rusia de lanzar un ataque con armas de gran potencia destructora, recuperamos películas que hablan de lo que puede suceder

Explosión nuclear en Nevada en 1953.
Explosión nuclear en Nevada en 1953.WikipediaWikipedia

La amenaza contra el mundo fue explícita y directa. El presidente ruso, Vladimir Putin ha advertido al resto del mundo de que dispone de armas nucleares y que podría utilizarlas si mueven posiciones en su contra ante la guerra de Ucrania para desatar el caos y la destrucción. Incluso ha desplegado una de las más potentes, a bordo de un submarino ruso en aguas del Báltico. El cine ya ha tratado de esta posibilidad en varias ocasiones. ¿Qué puede suceder cuando la guerra nuclear se dispara? Aquí van algunas historias.

Primero, vayamos con un clásico que sucede en submarinos. “La caza del octubre rojo” (1990), basada en la novela homónima de Tom Clancy es una de las historias más conocidas ambientadas en la Guerra Fría, que presenta el Octubre Rojo, el submarino nuclear más moderno de la Unión Soviética. Su característica revolucionario sistema de propulsión magnetohidrodinámica, lo hace indetectable para los sonares y el plan del gobierno soviético es provocar una explosión devastadora frente a las costas de EE UU. Sin embargo, su capitán tiene otros planes para evitar una masiva destrucción que conduzca a la III Guerra Mundial.

También apoyada en las historias de Tom Clancy se estrenó “Pánico nuclear” (2002), protagonizada por el personaje más conocido del novelista, el agente de la CIA Jack Ryan, quien, tras haber sido en anteriores ocasiones encarnado por Alec Baldwin y Harrison Ford, era protagonizado por Ben Affleck. En el momento álgido de esta historia, una bomba nuclear colocada por terroristas neonazis hacía explosión en Baltimore (EE UU).

Imagen de la película "Pánico nuclear", con Ben Affleck y Morgan Freeman
Imagen de la película "Pánico nuclear", con Ben Affleck y Morgan FreemanLa Raz

Pero, ¿qué sucede después de una gran detonación nuclear? Lo cuenta por ejemplo “El libro de Eli” (2010), en la que ya ha acontecido el Apocalipsis, llamado por los supervivientes “el resplandor”, y la especie humana se encuentra en el filo de la extinción. Solo unas pocas comunidades de supervivientes tratan de seguir adelante sobre las cenizas de la civilización. El problema es que los humanos luchan entre sí por conseguir recursos a vida o muerte. Esta es también la premisa de la trilogía “Mad Max” (1981, 1985 y 2015) en la que el orden tal y como lo conocíamos ha sido erradicado. La vida no vale nada porque los recursos son escasos. Los hombres se han convertido en bestias y la violencia es la única manera de seguir con vida.

Sobre las consecuencias del Apocalipsis también habla la estremecedora “La carretera” (2010) basada en la novela de Cormac McCarthy y protagonizada por Viggo Mortensen, en una historia de un padre y su hijo cuyas posesiones caben en un carrito de la compra. El cataclismo ha llegado y los supervivientes buscan entre los restos de un pasado de la Humanidad que ha sido borrado por la contaminación, los incendios y las inundaciones. El clásico de 1973 “Soylent Green: cuando el destino nos alcance” también se asoma a lo que queda del mundo después de una catástrofe. La fruta es un bien de lujo y los humanos se alimentan a través de unas pastillas fabricadas con plancton. En otro clásico del cine, “La hora final” (1960),la guerra nuclear ha arrasado el hemisferio norte. la contaminación lo hace inhabitable. Un submarino americano ofrece cobijo a los supervivientes mientras el capitán Towers (Gregory Peck) trata de reunir a tantos como pueda antes de que sea demasiado tarde.

Imagen de la película "Soylent Green", con Charlton Heston
Imagen de la película "Soylent Green", con Charlton HestonLa Raz

Sin embargo, quizá la que más merezca la pena ver sea “2024: Apocalipsis nuclear” (1975), por varias razones: la primera es que transcurre dentro de solo unos cuantos meses. La segunda, es que se trata de una distopía satírica. Un chico que tiene la facultad de comunicarse con su perro descubre, cuando cree que el mundo ha sido completamente arrasado, una sociedad que ha logrado establecerse bajo tierra. En esta lista no podría faltar la más famosa historia de destrucción y regeneración de la Tierra. “El planeta de los simios” (1968) ya advierte de cuál puede ser el destino de la especie humana: la autodestrucción y el nacimiento de un nuevo orden en el Planeta Tierra. Con sus sucesivas secuelas (ocho películas entre su estreno y 2017), esta franquicia nos asoma a día (o los siglos) venideros tras la explosión nuclear.

Aunque no explícitamente incorporan el estallido de la gran bomba, varias historias narran el apocalipsis de la especie. “12 monos” se sitúa entre 1996 y 1997, cuando algo ha convertido a la superficie de la Tierra en inhabitable. Los seres humanos viven bajo tierra y las enfermedades se apoderan de los supervivientes. “El día de mañana” (2004) e “Hijos de los hombres” (2006) son otras historias que se asoman a un mundo devastado o al final de la especie humana. Mientras en la primera es la crisis climática, en la segunda es la incapacidad de los humanos para reproducirse lo que pone a la civilización frente al espejo de su final.