Nadie quiere a Woody Allen

Las acusaciones de agresión sexual que pesan sobre su persona han sido el factor por el cual estas empresas editoras han rechazado trabajar con el cineasta

Parece mentira, pero la realidad es aún más extravagante que la toma de una de sus películas. Al menos cuatro editoriales han rechazado publicar las memorias del cineasta. El peso de su pasado y el acoso de las activistas más furibundas del Metoo nos dejan sin conocer la versión manuscrita de su historia, que por otra parte es la del cine contemporáneo. Ya ninguna productora quiere financiar sus películas. El director mantiene un litigio con Amazon, la plataforma con la que rodó la cinta "A Rainy Day in New York"y que al final decidió no estrenarla para no dañar su reputación. Un libro que hubiese tenido tantos pretendientes editoriales que no sabría por cuál decidirse no encuentra quien lo quiera. Su hija Dylan Farrow le acusó de abuso sexual, y aunque no pudo probarlo, Allen no fue declarado culpable por la Justicia e incluso encontró el apoyo de su hijo Moses, la mancha se ha extendido tanto que no hay quien limpie su nombre. La actriz Anjelica Huston ha salido en su defensa y asegura que no le importaría volver a rodar con él, pero el miedo a la publicidad negativa es tan potente que ningún ejecutivo da un paso al frente pese que en círculos intelectuales insisten en que no hay ninguna sentencia contra Allen y que, en cualquier caso, es grave que no deje expresarse a un creador de su talla.