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Pintura

Reabren los jardines de la localidad que inspiró a Monet

El artista impresionista modeló su hogar de una manera muy propia y original

Los nenúfares de Monet que se subastaron anoche en Sotheby's
Imagen de una obra donde se puede observar un fragmento de sus jardinesSotheby's / HANDOUTAgencia EFE

Los artistas tienen siempre sus más y sus menos a la hora de inspirarse. En el caso de Claude Monet fueron los jardines de su casa en Giverny, a 75 kilómetros de la ciudad de París.

En aquella casa, la cual le sirvió de hogar durante 43 años, fue donde elaboró algunas de sus piezas más reconocibles, las que le otorgaron el sobrenombre de ser uno de los mejores artistas.

El hogar del maestro impresionista

La obsesión por la luz, el color y el orientalismo se ve a la perfección en las paredes y fuera de la residencia. Con casi cien años sin inquilino, parece que era ayer cuando el artista se paseaba por su jardín, buscando una inspiración que él mismo había ido creando poco a poco.

Cuando la compró, con 43 años de edad, se encontró con una antigua prensa de manzana de pequeñas dimensiones y una granja adosada.

Un taller que hacía las veces de hogar

Una vez instalado, creó un taller que hacía las veces de hogar familiar. Pinta la fachada de color rosa y las puertas y ventanas de un verde muy intenso, al contrario del gris usual, y que se combina directamente con las plantas que crecen en la casa. Por otra parte, la entrada izquierda da acceso a la habitación del artista; la central es la principal y la de la derecha la del servicio.

La estancia conecta con la cocina y sus paredes están decoradas con azulejos de azul cielo con toques oscuros. Cuando se abre la puerta, se ve la sala más llamativa: un comedor amarillo que parece sacado de un cuadro de Van Gogh. Su habitación funcionaba como un expositorio de obras de otros grandes como Cézanne, Picasso o Manet.