Cara a cara: ¿Hay que echar a Valverde ya?

Ni un minuto más; por Quim Doménech

Valverde debería haber dejado el banquillo del Barça desde la humillante eliminación ante la Roma. El ridículo de Anfield confirmó que la segunda oportunidad había sido un error. Pero Bartomeu, lejos de querer admitir que no tiene proyecto ni alternativa, ha persistido en la equivocación. Hasta que de repente y contra todo pronóstico desiste y publicita el intento frustrado de fichar a Xavi. Un despelote. Pero que Valverde no puede seguir es algo que está claro desde hace tiempo.

Vestuario hundido Es muy fácil, Duro. Valverde es el responsable de que el Barça no juegue a nada y haya dejado escapar Champions a pesar de tener al mejor jugador de la historia. El problema es que el vestuario ha apoyado al entrenador que a su vez les ha permitido todo. Ahora Bartomeu tiene prisa por echar a Valverde, pero negocia con Xavi y se entera todo el mundo. ¡No se puede hacer peor! Cada vez que los jugadores miran al banquillo vuelven a ver la cara del entrenador de Roma o Anfield. Hasta que no haya un cambio reaparecerán los fantasmas.

Ya queda menos Que acabe esta pesadilla también para Valverde. El entrenador, viendo lo que está ocurriendo, debería dejarlo por dignidad. A ver qué le cuentan, pero saber que la directiva ya no tiene confianza en él y que han intentado fichar a su recambio basta para que sea él que decida dar un paso al lado. Duro, entiendo que te guste ver a Valverde en el banquillo y así el Barça siga perdiendo su identidad y algunas Champions. Pero por suerte ya queda menos.

El técnico es la víctima; por Alfredo Duro

Parece mentira, Quim. Tu estilo era el de alguien con la suficiente perspectiva para diferenciar víctimas y culpables, pero ya veo que has decidido hacer sangre con la víctima y eximir de responsabilidad al culpable. Echar ahora a Valverde es una señal de debilidad hacia el verdadero culpable de lo que ocurre en el Barça, que no es otro que Leo Messi.

Anfield, Manolas... Ahí está el quid de la cuestión. Messi es el único rey de la selva azulgrana y, como no podía ser de otra forma, el rugido del rey os lleva a todos los demás a señalar a Valverde, la presa más fácil y débil. Esto es tu Barça de hoy. Un depredador que no es capaz de enfrentarse con su verdadero enemigo y se conforma con despedazar públicamente a un entrenador que ha sido dejado en evidencia por la ridícula fotografía que sus jugadores, Messi incluido, dejaron en el córner de Anfield o el mítico remate de Manolas en Roma.

Excusa perfecta Ya está bien, Quim. Ya está bien de escurrir siempre el bulto. Vale ya de esconderse en las derrotas y presumir en las victorias. No puede ser que siempre gane Messi y que ahora sólo pierda Valverde. Pides que el entrenador tenga dignidad, pero lo que de verdad hay que pedir, es que Messi deje de encontrar siempre la excusa perfecta para quedar al margen de los fracasos que va acumulando. Valverde, un muy buen tipo nacido en Viandar de la Vera (Cáceres) ha sido traicionado por su falta de ADN catalanista. Esa es la durísima y triste verdad de todo esto.