Andrew Kerins: el marista que fundó uno de los equipos de fútbol más importantes de Europa

El fútbol es una institución en muchos lugares del mundo. Pese a que algunos lo ven como un deporte más el balompié ha conseguido a lo largo de casi dos siglos ser toda una referencia capaz, incluso, de generar tensiones políticas. Pese a ello, en la mayoría de los casos el fútbol es capaz de congregar a millones de personas frente a un televisor para disfrutar de 90 minutos de emoción.

Barça y Madrid, el derby de Manchester o el duelo del Guadalquivir entre el Betis y el Sevilla son solamente tres ejemplos de las rivalidades más conocidas en este mundo. Algunos equipos, incluso, se diferencian entre sí por detalles muy relevantes en la sociedad. Por ejemplo, la religión ha llegado a ser la excusa de una de las rivalidades más importantes en el planeta de este deporte, la del Celtic de Glasgow y el Rangers.

Deporte y religión

Pese a que la rivalidad se centra por ser católicos y protestantes en el presente texto nos centraremos en la fundación de Celtic de Glasgow. Así, este equipo escocés cuenta con una fundación de lo más curiosa gracias a un marista. Andrew Kerins, originario de Irlanda, creó este club para poder ayudar a la población contra la hambruna que se vivía a finales del siglo XIX en el país.

Conocido como Hermano Walfrid solicitó su ingreso en 1864 en la Orden de losMaristas en 1864. Una vez dentro el religioso se dio cuenta de la hambruna y las necesidades materiales que los miembros de su orden sufrían por lo que decidió realizar un acto que cambiaría la historia del fútbol escocés para siempre.

Así las cosas, Walfrid fundó el Celtic Football Club, en 1887, como un medio para recaudar fondos para los católicos pobres y desfavorecidos en el este de la ciudad de Glasgow. Pese a ser trasladado unos años después a Londres continuó con su trabajo organizando partidos de fútbol y mostrando gran amabilidad a los niños católicos descalzos en los distritos de Bethnal Green y Bow. Esta organización benéfica establecida por Walfrid se llamó The Poor Children’s Dinner Table y fue todo un referente para luchar contra las desigualdades de la zona.

Walfrid, además, consiguió con su equipo de fútbol convencer tanto a empresarios como personas adineradas para que se implicaran en el proyecto. Así, con el paso de los años consiguió recaudar fondos con las disputas de partidos u otros eventos para luchar contra el hambre y otros problemas de las familias.

Desde entonces el club fue creciendo con la caridad como bandera. Así, gracias al proyecto de este religioso el equipo se convirtió en todo un referente del fútbol mundial. Incluso, la rivalidad con el Rangers ha traspasado fronteras siendo un partido conocido por prácticamente todos los amantes del fútbol.

Walfrid sigue estando, así, muy presente en el equipo. En 2005, por ejemplo, en el estadio del equipo, el Celtic Park, se instaló una estatua del fundador marista. Incluso, su inauguración se realizó por el mismo arzobispo de Glasgow debido a que el religioso todavía es un emblema y ejemplo en el club.