Asensio saca su cara B: los dos penaltis fallados en menos de 30 minutos en la Premier

El Aston Villa se sacudió el golpe recibido en París y volvió a sonreír en la Premier. Los de Unai Emery firmaron una victoria contundente (0-3) frente a un Southampton ya condenado al descenso, y se colocan de nuevo en puestos de Liga de Campeones tras sumar su cuarta victoria consecutiva. Pero no todo fue brillantez en St Mary's. La noche dejó también una imagen difícil de olvidar: Marco Asensio fallando dos penaltis en un mismo partido. Dos veces al mismo lado. Dos veces con el mismo resultado. Y una desesperación que acabó en resignación.

El primero llegó con 0-0 en el marcador. Asensio se plantó confiado ante Aaron Ramsdale, pero el portero inglés le adivinó el disparo con facilidad. El balear, lejos de cambiar el guion, repetiría exactamente la misma fórmula más adelante, en el tiempo añadido, en busca de una redención que jamás llegó. El resultado fue idéntico: mismo lado, mismo gesto, mismo fallo. Y esta vez, ni siquiera fue a por el rechace. McGinn, que sí estuvo atento, empujó el balón al fondo de la red mientras Asensio estaba de espaldas a la escena con los brazos caídos, derrotado más anímicamente que en lo futbolístico.

Por suerte para los 'Villanos', el drama desde los once metros no afectó al desarrollo del partido. El Aston Villa fue superior de principio a fin y encontró en Ollie Watkins el impulso que necesitaba. El delantero inglés firmó una auténtica obra de arte: controlando un pase largo de más de treinta metros y definiendo de vaselina ante Ramsdale, en una acción que valía mucho más que tres puntos.

Los de Emery, liberados

El gol liberó por completo a los de Emery, que, tras ese momento de inspiración, aceleraron sin mirar atrás. Donyell Malen hizo el segundo con un derechazo imparable, y en el descuento, como ya se ha contado, llegó la segunda oportunidad fallida de Asensio, salvada finalmente por McGinn para redondear la goleada.

Con este triunfo, el Aston Villa se coloca quinto en la clasificación con 54 puntos, uno por debajo del Manchester City y uno por encima del Chelsea, que aún debe jugar su partido ante el Ipswich Town. La carrera por los puestos Champions está al rojo vivo, y los de Birmingham, liderados por un Emery cada vez más consolidado, quieren estar ahí hasta el final.

Del otro lado, el Southampton sigue en caída libre. Con el descenso ya consumado la jornada pasada, su única pelea es ahora no pasar a la historia como el peor colista de la Premier League. Los 'Saints' necesitan al menos un punto en los seis partidos que les restan para igualar los once que hizo el Derby County en la desastrosa 2007-2008.

Pero más allá de estadísticas o clasificaciones, el foco estuvo en Marco Asensio. No es habitual ver a un futbolista lanzar dos penaltis en un mismo encuentro. Mucho menos que falle ambos. Y aún menos que lo haga exactamente igual. Su segundo error, tan clónico como el primero, fue un gesto de empecinamiento o de bloqueo mental. Lo más duro fue ver cómo, después de la parada de Ramsdale, se quedó quieto, sin reacción, dejando que fuera otro el que empujara el balón.

En una tarde que pudo haber sido de redención, Asensio terminó siendo protagonista por lo contrario. Y el Aston Villa, sin necesitarlo demasiado, volvió a ganar.