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El chiringuito de Pedrerol: ¿Fin de ciclo de Zidane?

Zidane, anoche en el banquillo del Benito Villamarín durante el Betis - Real Madrid
Zidane, anoche en el banquillo del Benito Villamarín durante el Betis - Real Madridlarazon

Pase lo que pase en la Champions, el Madrid tendrá que afrontar este verano cambios importantes en la plantilla, pero... ¿querrá afrontarlos el francés?.

Zidane es un tipo que no se agarra a la poltrona, alguien capaz de perdonar un año como jugador y la pasta que eso suponía. No se mueve por intereses, se mueve por sensaciones. Llegó con el equipo hundido y lo levantó hablando a los futbolistas de tú a tú. Porque eso es Zidane. Un compañero. Un consejero. Un motivador. El ídolo. Y consiguió lo que parecía imposible: dos Champions y una Liga en año y medio. Ha batido todos los récords y nunca ha perdido la sonrisa.

Les ha dado todo. Esta temporada no está siendo nada fácil. Les ha dado absolutamente todo a los jugadores. Les ha protegido. Les ha blindado. Ha dado la cara por ellos y les ha defendido en los buenos y en los malos momentos. Sobre todo en los malos. Impidió la llegada de Kepa por 20 millones, un chollo para el Real Madrid, poniendo al vestuario por encima incluso del club. Y Florentino se lo permitió.

El vestuario está con él. De ahí la reverencia de Marcelo, esa dedicatoria tras el tercer gol al PSG. El brasileño le transmitió el mensaje de agradecimiento de todo el vestuario. Los jugadores se lo deben. Le deben esta Champions. Han bajado los brazos en esta Liga demasiado pronto y han hecho el ridículo en la Copa. Y hay plantilla para más. Para muchísimo más.

Agotado. Concentración, compromiso, lucha. Son tres palabras que no han estado en el diccionario del Real Madrid este año. Y Zidane se ha cansado. Zidane está agotado. Si no gana ningún título, se va a marchar.

No será destituido. Y hasta si Zidane gana otra Champions, su futuro está por ver, como dijo Sergio Ramos. Da igual el contrato, que tenga un año, dos o cinco. Florentino lo sabe. El presidente, pase lo que pase, no le va a destituir. Su continuidad depende exclusivamente del francés. Se ha ganado el derecho a decidir. Porque la Champions no esconde la realidad: el Madrid debe hacer cambios importantes en la plantilla.

Decisiones. El futuro de Bale dependerá de lo que haga el galés de aquí a final de temporada. El de Benzema, de que llegue una oferta importante en verano. E Isco es otro de los que lo tiene complicado. Habrá también que replantearse el papel de los recién llegados. Theo, Vallejo, Marcos Llorente y Ceballos no han gozado de la confianza del técnico galo y habrá que analizar caso por caso si merecen la oportunidad de vestir otro año la camiseta del Madrid.

La gran pregunta. Gane el Madrid la Champions o no, en el club madridista tienen que tomar decisiones importantes cuando finalice la temporada. Y la cuestión a plantearse ahora mismo es si Zidane se vería con fuerzas para afrontar y liderar tantos cambios en la plantilla. La pregunta es si a Zidane le apetece confeccionar una lista de bajas. Y la respuesta es que no.