El lamento del Barcelona: "El cuarto gol es de juveniles"

Busquets no sabía ni qué decir en los micrófonos de Movistar Liga de Campeones. Su cara hablaba por él. «Han sido mejores», acertó a reflexionar. «Pedimos perdón, que pase esto después de lo de Roma...», añadió. Pero a lo demás: «No sé». No sabía qué había pasado ni por qué. No sabía cómo se dejaron marcar un cuarto gol como el que les marcaron, que fue el colmo, pero no el problema fundamental de la eliminatoria.

El centrocampista no fue el único que dijo «no sé», o cualquiera de sus sinónimos. «No tiene explicación lo del cuarto gol», aseguró el presidente, Josep Maria Bartomeu, también visiblemente tocado. «Otro palo, como el del año pasado ante la Roma. Otra noche nefasta», insistió el máximo mandatario. Valverde ni siquiera vio en directo lo que había sucedido en ese último tanto. «Cuando he mirado el balón ya estaba entrando. Estábamos muy concentrados para las jugadas de estrategia y mira... Ha sido una jugada sorprendente que no he visto», manifestó el entrenador azulgrana. Luis Suárez lo definió mejor que nadie: «El cuarto es un gol de juveniles». El delantero fue de los que dijo que habían aprendido de los errores, pero volvieron a tropezar. «No sé si es cosa de actitud, pero estamos en el Barcelona, no nos pueden meter dos goles seguidos», continuó.

Valverde intentó hacer alguna reflexión futbolística para encontrar los motivos del desastre de Anfield. «Ellos han jugado fuerte y bien. Hay que felicitarles por la eliminatoria que han hecho. Es doloroso para nosotros, sobre todo para nuestra gente, estábamos concentrados para que no pasara y hemos vuelto a caer», dijo. «Han hecho una presión altísima, que no hemos superado. Pero es tomar riesgo y es como todo: si el contrario hace presión alta y recupera cerca de tu área y convierte y tú no castigas...», continuó Valverde.

El técnico queda tocado tras caer de forma estrepitosa en Europa por segundo año consecutivo. «Ahora estamos todos muy en caliente», dijo Bartomeu, que también admitió que tendrán que analizar internamente lo que ha sucedido, lo que puede sonar a amenaza. Antes, tendrán que disputar la final de la Copa del Rey contra el Valencia, para sumar un nuevo doblete. La temporada, analizada fríamente, es buena, pero los dos desastres continentales consecutivos y cómo se han producido han hecho mucho daño al Barcelona. «Cuando tienes un batacazo de este calibre, tenemos que pasar unos cuantos días horribles, como toda nuestra gente, porque es así. Hay que pasar esa penitencia y con el tiempo que nos queda, volver a rehacernos y acabar la temporada ganando otro título. Ahora mismo estamos tocados», admitió Valverde, al que Luis Suárez salva de la quema: «Los culpables somos los jugadores».