La Fiscalía ve irregularidades en la reunión de Rubiales con la jefa de prensa de la RFEF

Nuevo episodio del caso Rubiales. El juez de la Audiencia Nacional que investiga esta causa ha tomado declaración a tres trabajadores de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), que presidía Luis Rubiales, principal investigado por haber dado un beso en la boca a la futbolista Jenni Hermoso tras la final del Mundial de Sídney, Australia. Se trata de su jefe de gabinete, José María Timón; del responsable de "compliance" de la federación, Javier Puyol; y del psicólogo de la selección femenina, Javier López Vallejo.

Según fuentes jurídicas consultadas por LA RAZÓN, la Fiscalía ha visto algunas irregularidades en los testimonios que relatan lo ocurrido en la reunión que mantuvo Rubiales con la jefa de prensa de la federación, Patricia Pérez.

De la declaración de Javier Puyol Moreno, se dedujeron importantes irregularidades sobre el testimonio de Pérez, que compareció ante el tribunal a finales de septiembre. Según ella, el 23 de agosto estuvo encerrada durante varias horas en el despacho de Rubiales.

En aquella ocasión, la todavía jefa de prensa de la selección admitió haber recibido presiones por parte de responsables de la RFEF solo unos días después de haber afirmado que la futbolista había dado el consentimiento a las declaraciones difundidas por la RFEF. Fue Patricia Pérez la que dijo a Jenni que bajara del bus, mientras el resto de futbolistas y staff permanecía arriba, para mostrarle el texto del comunicado. Hermoso preguntó si era "obligatorio" y ella le respondió que "sí". Entonces, la jugadora respondió "haced lo que queráis" y subió de nuevo al autobús. Posteriormente fue distribuido a los medios.

Por su parte, Puyol también aportó datos apuntan a contradicciones entre los participantes en esa reunión, algunos de ellos han prestado declaración hoy y otros en jornadas anteriores. El jefe de gabinete de Rubiales también ha declarado incurriendo en algunas contradicciones frente a las versiones de otros testigos. Por su parte, López Vallejo, ha declarado que no tiene conocimiento de los hechos o no los recuerda bien.

El magistrado de la Audiencia Nacional Francisco de Jorge sigue recabando testimonios sobre lo ocurrido tras la victoria de la selección española de fútbol femenino en Australia, el 20 de agosto. Hermoso ha acusado a Rubiales de haberle propinado un beso sin su consentimiento y de haberla sometido a ella y a su entorno a presiones para que reafirmara su versión pública de los hechos: que el beso estaba pactado y que contaba con su consentimiento. Y también ha señalado a los trabajadores más cercanos de la RFEF de haber participado en estas actuaciones.