La gran noche de "Cafucas" Vázquez en el Clásico

Lucas Vázquez está en el puesto número 18 de minutos esta temporada en el Real Madrid. No está ni de lejos entre los más utilizados por Ancelotti, pero precisamente por eso es un ejemplo, porque a pesar de que ha estado mucho tiempo a la sombra, ha entendido que en el Real Madrid hay que estar siempre disponible para jugar aunque sea un puñado de segundos. Ahora que la temporada enfila la recta definitiva, ha aparecido el canterano, que se fue para ganarse un puesto de manera definitiva en el club de su vida. El ahora lateral apareció en Mánchester ante el City cuando le requirió Ancelotti y no le tembló ni una pestaña cuando tuvo que lanzar uno de los penaltis de la tanda. Se fue a lanzar el suyo haciendo malabares con la pelota, igual que en Milán en la final de la Champions ante el Atlético, y batió con mucha tranquilidad a Ederson. En el Clásico fue titular para dar un respiro a Carvajal, y lo que hizo fue convertirse en un jugador decisivo. Provocó el penalti del primer empate, marcó el tanto del 2-2 y le puso a Bellingham el balón para que hiciera el tercero. Es decir, un gol, una asistencia y un penalti provocado. Un partidazo de un habitual actor secundario que sabe cuándo tiene que dar un paso adelante.

«Después del esfuerzo en Mánchester hemos vuelto a darlo todo para conseguir la victoria que nos da esa ventaja y nos acerca el título», decía en RMTV. «Faltando cinco minutos, en una falta en contra, hemos hablado de que teníamos que ir a por el triunfo, a por el gol, y creo que eso es lo que tiene este escudo», continuaba «Cafucas», el apodo por el que se le conoce, una mezcla de su nombre, Lucas, y del de Cafú, el mítico lateral derecho brasileño.

Lucas fue un poco Cafú en el Clásico que podía definir la Liga, justo cuando parecía que su tiempo en el Madrid empezaba a terminarse. «Han salido muchas cosas bien y esto es muy importante para todos», decía con modestia cuando le preguntaban por su actuación.

Tiene una confianza que no mostraba en otros tiempos y se ha adaptado perfectamente a ser lateral en lugar de ese extremo que llegó a la élite. Con su reconversión sale ganando el Madrid y él, porque sabe defender, y si no que se lo pregunten a Raphinha, el jugador más en forma del Barcelona en los últimos encuentros y que pasó por el Santiago Bernabéu sin hacer el menor ruido. Había sido el futbolista más influyente y en el Clásico lo secó Lucas Vázquez, que gobernó el partido desde el lateral derecho, aprovechando la frescura física que tiene ahora.