Hípica

Juan Carlos Campos o el reto de impartir justicia en la Doma Clásica

Es uno de los Jueces más prestigiosos a nivel nacional e internacional de la disciplina. «Si hay diferencias de más de cinco puntos, se intenta resolver para que no se repita», asegura

La Doma Clásica es la máxima expresión de la belleza y delicadeza en el deporte ecuestre, siempre en busca de la perfección y la conexión entre caballo y jinete. «La Doma Clásica es una disciplina Olímpica basada en la armonía entre jinete y caballo a través de la cual se realizan una serie de movimientos de gran dificultad que aparecen indicados siguiendo un programa preestablecido en un texto llamado reprise. Los movimientos que el caballo ejecuta, aunque son naturales para el caballo, requieren grandes dosis de entrenamiento y preparación del binomio. Los caballos se desplazan lateralmente, giran sobre sí mismos, cambian de pie al galope y ejecutan aires de extrema dificultad y belleza como Passage y Piaffe entre otros, siempre observados por los Jueces que les puntúan dentro de una pista de 20x 60», según define la Real Federación Española de Hípica.

Los jueces son los encargados de puntuar a los binomios que compiten. Al contrario que el Salto, donde el resultado es objetivo y entendible para cualquier profano –se cae el palo o no–, en Doma Clásica son los jueces los encargados de determinar la calidad de las ejecuciones que se desarrollan en el cuadrilongo.

Juan Carlos Campos es un Juez internacional categoría 4*, amante del deporte ecuestre y presente en las principales citas nacionales e internacionales. Campos es un Juez con mucha experiencia y está muy involucrado en el mundo del caballo. También es Técnico Deportivo en Equitación y dirige la Asociación de Oficiales de competiciones hípicas, es parte del Comité Técnico Nacional de Jueces y siempre es proactivo para aportar su granito de arena en el sector. Para él, el Juez es aquel que «ejerce de árbitro en la competición. La persona que valora la actuación del binomio, determina la calidad del jinete y del caballo y hace cumplir el Reglamento». «La evolución de nuestro deporte ha ido muy bien en todas las categorías», comenta a LA RAZÓN.

Juan Carlos Campos, que en breve impartirá una serie de cursos de promoción de Jueces a nivel nacional, aspira a ascender a la máxima categoría internacional, ser Juez 5*. Lo suyo es principalmente pasión, lo considera más un hobby que un trabajo y reconoce que económicamente hay mejores salidas laborales dentro del mundo del caballo.

El tema de la disparidad de puntuaciones reconoce que es una realidad, pero menos que antes: «Si hay diferencias de más de cinco puntos, se intenta resolver para que no se repita».