Motociclismo
Manu González, líder de Moto2: "Subir a MotoGP a la moto que queda libre no me gusta"
El madrileño es líder de la categoría y está muy cerca del título, que buscará reeditar en 2026. Su regularidad está siendo la clave
Manu González (Madrid, 2002) tiene en su mano ser campeón del mundo de Moto2. Con 125 puntos por disputar (cinco carreras), el piloto de LS2 le saca 34 a Diogo Moreira y 49 a Arón Canet. Su regularidad (4 victorias y 9 podios) le permite depender de sí mismo en esta recta final, algo que le gusta, porque asegura que su punto fuerte es la "mentalidad". Este fin de semana espera dar un nuevo paso en Indonesia.
¿Cómo se define como piloto?
Creo que siempre consigo elegir muy bien los momentos en los que atacar o conservar. Esto no es fácil, porque en el motociclismo nunca tienes la misma situación dos veces, pero he trabajado muchos años con un psicólogo deportivo, y creo que sería mi punto fuerte. Me definiría como muy completo en todo, no tengo a lo mejor ningún punto súper fuerte, pero tampoco ninguno débil.
Esa fórmula de ser tan regular, le está dando resultado...
Sí, yo siempre he sido así, siempre he controlado muy bien el límite y el riesgo y no sobrepasarlo, y ahora mismo estamos en un momento en el que justamente es lo que tengo que hacer. Me hubiera gustado ganar muchas más carreras, pero Moto2 es Moto2, y tenerlo todo en línea todos los fines de semana es muy complicado, y siempre hay alguno que tiene un paso más en una carrera. Hemos sido los más regulares, siempre luchando por el podio, y depende todo de nosotros en estos cinco Grandes Premios.
¿Ser líder le pone presión?
Hemos llegado a un punto en el que tenemos que centrarnos solo en nuestros resultados y en no cometer fallos. Obviamente tengo mucha presión, porque soy el primero y el que tiene que gestionarlo, pero también la presión me ha gustado siempre y cuando la he tenido no he cometido fallos. Espero que sea igual esta vez.
¿Le motiva el reto de ser doble campeón de Moto2, ya que no va subir a MotoGP en 2026?
Sí, me motiva muchísimo. Hay que ganar el primero y luego iremos a por el segundo, pero sé que el año que viene va a ser aún más complicado que este, porque ahora mismo el nivel de Moto2 es impresionante y un día que te despistas te pasan tres. No puedes ni respirar. Lo bueno es que estoy en un gran equipo y tengo buena conexión con mis técnicos. Obviamente, mi sueño es llegar a MotoGP, este año ha habido una posibilidad que no pudo ser, pero al final era una posibilidad que no era la mejor opción. Nos quedamos, pero lo hacemos ganando.
No quiere subir por subir...
Claro, era prácticamente subir a la única moto que quedaba libre y no me gusta. Me gustaría llegar a un proyecto mucho más competitivo, donde la moto sea mejor y el equipo sea mejor, y creo que ganando, siendo campeón, dicen: «Bueno, él ha sido campeón, entonces algo sabe, y si dos años seguidos lucha por ganar, entonces es que algo bueno tiene». Espero que los equipos buenos lo vean y puedan contar conmigo.
La nueva propiedad de MotoGP quiere dar valor a los títulos de la clase reina y no tanto a los de categorías pequeñas...
Se han ido separando las categorías y yo creo que esto es un fallo, no solo para nosotros, sino para la afición, porque no a todos les gusta solo MotoGP. Los que son fans de verdad ven cualquier categoría con la misma ilusión. Entiendo que donde mayor visibilidad y más presupuesto hay es en MotoGP, pero bueno, las categorías bajas también necesitan visibilidad y patrocinadores. Cuanto menos importancia les den, más complicado será hacer los campeonatos para los equipos, que ya hay algunos que están en dificultades. Si esto sigue así va a ser mucho peor y va a haber equipos y pilotos que no puedan correr. Así que espero que no sigan por esta línea porque será un gran error. Pero bueno, por una parte lo entiendo, también tienen que aprender de los errores los organizadores.
¿Qué le ha parecido el año de Marc Márquez?
Está siendo impresionante lo que está haciendo. Es verdad que cuando el mejor piloto tiene la mejor moto no hay otra cosa que hacer. Tiene un nivel de confianza que hace que si ha cometido algún error ha sido por fallo suyo, por sus propias decisiones. La distancia con el resto ha sido muy grande.
Llegaron a decir sus «haters» que había dejado ganar a su hermano en Montmeló...
Yo le conozco un poco y no se deja ganar ni para ver quién es el primero que sube el ascensor. Entonces, cuando dice que no ha dejado ganar a Álex, te digo yo que es verdad, que no le deja ganar ni jugando a las cartas ni a nada.