Fútbol americano
Doble palo para Trump y Taylor Swift en la Super Bowl
Eligió un mal día Donald Trump para convertirse en el primer presidente de Estados Unidos en acudir a una Super Bowl o, al menos, eligió mal a su favorito.
En una de las victorias más impactantes que se recuerden en la historia de la NFL, los Philadelphia Eagles arrollaron el domingo por 40-22 en el Super Bowl a los Kansas City Chiefs, que perseguían en Nueva Orleans un tercer título consecutivo, algo nunca logrado por ningún equipo. Y no hubo primera vez, porque los Eagles se impusieron de una manera contundente.
El quarterback Patrick Mahomes, que aspiraba a igualar las cuatro coronas del mítico Joe Montana, ofreció la versión más errática de su carrera frente a la poderosa defensa de los Eagles, que se tomaron una dulce revancha de la derrota de 2023 en la final del fútbol americano ante sus antiguos verdugos. La debacle de los Chiefs, que llegaron a estar 0-34 en la cuenta, fue un duro golpe para la dinastía que lideran Mahomes y Travis Kelce, que volvió a ser alentado desde las gradas del Caesars Superdome por su pareja, la superestrella del pop Taylor Swift. Pero también lo fue para Donald Trump.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, había deseado horas antes "que gane el mejor equipo" en la Super Bowl a la que ha acudido junto a su mujer, Melania. "Esta noche, esperamos un partido fantástico y la coronación de los campeones de la Super Bowl. Melania se une a mí para enviar nuestros mejores deseos para un gran domingo de Super Bowl. Que gane el mejor equipo", señaló Trump en un comunicado.
El republicano se convirtió así en el primer presidente en ejercicio en asistir a este evento deportivo, el más importante en Estados Unidos. Otros mandatarios como George H.W. Bush (1989-1993) acudieron a la Super Bowl después de dejar el cargo.
Trump afirmó que alentaría a los dos grandes equipos que se enfrentan en el partido definitivo, los Kansas City Chiefs y los Philadelphia Eagles, para conseguir el Trofeo Vince Lombardi de la Liga Nacional de Fútbol Americano. Pero lo cierto es que iba con los Eagles. Eligió un mal día Donald Trump para convertirse en el primer presidente de Estados Unidos en acudir a una Super Bowl. O, al menos, eligió mal a su favorito. Horas antes del partido declaró su amor por Patrick Mahomes y, aún más, por su mujer Brittany, fan declarada del mandatario republicano.
Donald Trump había pronosticado una victoria de los Kansas City Chiefs. "Cuando un 'quarterback' gana tanto como él ha ganado, tengo que ir con Kansas City. Tengo que ir con Kansas City", dijo Trump, refiriéndose a Patrick Mahomes, durante una entrevista con Fox News. El mandatario también aseguró que "Philadelphia tiene un equipo fantástico", por lo que "va a ser un gran partido". Durante una rueda de prensa esta semana en la Casa Blanca, Trump ya dijo, refiriéndose a Mahomes, que "hay cierto 'quarterback' que parecer ser un ganador bastante sólido". Preguntado por estas declaraciones, Mahomes respondió: "Es genial escuchar que ha visto cómo juego al fútbol americano y respeta mi forma de jugar". Aunque Mahomes se ha mantenido alejado de la pugna política, familiares próximos como su esposa y su madre han mostrado su simpatía pública por Trump.