Tenis

Sinner ya puede presumir: Italia, campeona de la Davis

El número uno transalpino fue el héroe en la final ante Australia

Sinner, el héroe de Italia en la conquista de la Ensaladera
Sinner, el héroe de Italia en la conquista de la EnsaladeraJorge ZapataAgencia EFE

Italia puede presumir de su segunda Ensaladera de Plata 47 años después. Aquel equipo transalpino liderado por Adriano Panatta se impuso por 1-4 en Chile y la Italia de Jannik Sinner lo ha hecho en Málaga liderada por uno de los jugadores llamados a liderar el circuito en los próximos años. El héroe en las eliminatorias ante Países Bajos y la serbia de Djokovic fue un ciclón ante Alex de Miñaur. El australiano apenas ofreció oposición en el primer set y terminó claudicando por 6-3 y 6-0. Sinner redondeó el trabajo que había comenzado Matteo Arnaldi con su triunfo ante Alexei Popyrin por 7-5, 2-6 y 6-4.

Sinner no ha hecho más que confirmar en el Martín Carpena muchas de las expectativas que ha ido generando a lo largo de la temporada. Ha terminado el curso como número cuatro del mundo, peleando el título de las Nitto ATP Finals ante Djokovic y levantando la segunda Copa Davis para su país. Con 22 años es por pleno derecho uno de los candidatos a la sucesión de los Federer, Nadal y Djokovic. Sinner está ya casi a la altura de Alcaraz y su final de temporada lo ha ratificado. Todavía no ha sido capaz de levantar un Grand Slam a diferencia de Carlitos, pero nadie duda que más pronto que tarde lo terminará haciendo. Su tenis y su cabeza han ido madurando con el paso de los meses. Y la prueba más evidente en Málaga llegó con las tres bolas de partido que levantó en el tercer set de las semifinales ante Djokovic. Seis días después de caer en la final del Torneo de Maestros ante el serbio fue capaz de voltear un partido de esos que no se le escapan jamás al de Belgrado. Con su triunfo ante Nole dio más de media Ensaladera a su país. Arnaldi cumplió con nota su misión en el primer partido de la final. Popyrin amenazó con remontar después del primer set, pero el italiano, número 44 del mundo, fue más fiable en los momentos críticos.

Sinner no dejó escapar la oportunidad. Campeón en Pekín, campeón en Viena –antes había ganado en Montpellier y Canadá– y finalista del Torneo de Maestros. Su final de curso ha sido sobresaliente y lo de Málaga, la confirmación de que Alcaraz tiene un rival muy serio.